Corinna Sayn-Wittgenstein: “Sólo traté de encontrarle un trabajo digno a Iñaki”

Corinna zu Sayn-Wittgenstein, amiga del rey Don Juan Carlos, ha hecho sus primeras declaraciones después de que su nombre apareciese en los correos electrónicos facilitados al juez por Diego Torres, socio de Iñaki Urdangarin en distintas empresas desde 2003 hasta al menos 2008.

“Sólo traté de encontrarle un trabajo digno a Iñaki”, ha asegurado Corinna en una entrevista al diario El Mundo. "Sólo traté de ayudarle a encontrar tal como me pidió un empleo compatible con su posición", ha añadido la princesa, quien vive en Mónaco y afirma de sí misma que es "una mujer discreta y leal". 

Corinna Sayn-Wittgenstein niega haber recibido algún tipo de cobro por sus gestiones con Urdangarin y dice que fue la “primera sorprendida” cuando el duque de Palma no aceptó el empleo. Los correos de Torres dan cuenta de las lucrativas gestiones de Urdangarin. Mientras ganaba cientos de miles de euros por distintos contratos a dedo de los Gobiernos de la Comunidad Valenciana y Baleares, ambos del PP, entre 2004 y 2006, negociaba con Corinna un cargo institucional en la fundación Laureus, que otorga cada año los denominados oscar del deporte, que le dejaría un salario anual superior a los 200.000 euros. Pero esa negociación nunca llegó a buen puerto.

En uno de los correos entregados por la defensa de Torres al Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, Francisco Larrey, quien fuese empleado de Nóos, ironizaba en un email dirigido al presunto testaferro de Urdangarin, Mario Sorribas: "Mario, ¿crees que me podré casar con la señorita Corinna?". En otro email, Sorribas agradecía a Larrey la participación de Corinna con un "¡ahí has 'estao' torero Francisco! Yo creo que éste es el camino para llegar a cualquier parte del mundo". Por su parte, la propia noble también daba las gracias a Larrey en otro email afirmando, en inglés, haberle alegrado el día ("it may my day!!!").

La princesa y consultora internacional, de 48 años, saltó a primera plana de la prensa cuando se supo que acompañaba al Rey en la cacería de Botsuana en abril de 2012. Asegura mantener una relación de "entrañable amistad" con el monarca, al que conoce desde 2004.