El juez del ‘caso Nóos’ archiva la investigación al diputado del PSC

El ex director de Deportes del Ayuntamiento de Barcelona y actual diputado en el Congreso, Albert Soler Sicilia, del PSC, ha desaparecido del caso Nóos. El juez José Castro publicó este jueves un auto en el que archiva, por “carencia de base objetiva”, las actuaciones que sobre él abrió después de recibir un expediente del Área de Calidad de Vida, Igualdad y Deportes del Ayuntamiento Barcelona. “Sin previa petición del juzgado”, observó Castro, el Ayuntamiento catalán remitió un dossier en el que se levantaban sospechas penales sobre Soler, acerca de un contrato que firmó, en 2004, con el Instituto Nóos desde su departamento.

Un antiguo Director de Relaciones Institucionales e Internacionales de Barcelona, Juli Pernas, hoy director del Museo Olímpico de la ciudad, aportó la documentación de los trabajos y gestiones de Nóos, extremo que usa el juez para despejar al diputado de problemas judiciales. El rastro de los trabajos y mediaciones de 2004 permanecen en la Fundación Barcelona Olímpica. El diputado socialista trasladó al juez, por su cuenta y sin previo requerimiento, información aclaratoria sobre el caso.

Albert Soler tramitó con el lobby de Nóos de Iñaki Urdangarin y Diego Torres un contrato de 12.000 euros para el “diseño de actividades de la red europea del deporte y la creación de contenidos para propuestas y eventos internacionales”. El juez observó inicialmente, en base a la información traspasada por el Ayuntamiento, que había "indicios de criminalidad" ante la “falta de acreditación material de los trabajos encargados” y retribuidos a Nóos. “Por mucho que se alabaran sus excelencias” la carpeta estaba vacía, recordó ayer.

El instructor del caso Nóos, el pasado mes de octubre, primero citó a declarar a Soler como imputado, sin conocer su condición de aforado y, después, anuló la cita y solicitó si contaba con una credencial de diputado al Congreso, para trasladar su caso al Tribunal Supremo para que le indagase. El juez Castro no investigará más en esa línea ni abrirá el camino para que se haga. No ve caso, ni pieza separada del caso Nóos. Sí reprende la ausencia de control de Soler sobre los expedientes y archivos de su departamento y el que no hubiera informado al Ayuntamiento cuando, meses atrás, se le reclamó información sobre el citado contrato de Nóos en 2004. El controvertido expediente, observa José Castro.