Felipe González se muestra favorable a la agrupación de municipios

El expresidente del Gobierno, Felipe González, se ha mostrado hoy favorable a que la reforma de la Ley de Bases de Régimen Local proyectada por el Ejecutivo de Rajoy incluya medidas para la agrupación de municipios, aunque sin que estos “pierdan su identidad”. El político socialista también ha defendido la conveniencia de suprimir las diputaciones provinciales.

González, que ha participado en un curso de verano en San Lorenzo de El Escorial (Madrid), se ha referido al anteproyecto de reforma de la citada ley, que prevé la agrupación de entidades locales y la ordenación de las denominadas “competencias impropias”, con el objetivo de reducir costes económicos.

Refiriéndose a las diputaciones provinciales, el expresidente ha señalado que ya manifestó hace tres años sus reticencias a la existencia de cuatro ámbitos en la administración española –estatal, autonómico, provincial y municipal-, pero que entonces se le “echó mucha gente encima”. González ha afirmado que el gasto de las diputaciones asciende a 6.000 millones de euros y que solo el 20% de esa cantidad “llega a la gente”, ya que el 80% restante se dedica a gasto corriente. Lo “más doloroso”, ha dicho el político socialista, es que haya más de 8.100 municipios y no puedan prestarse servicios adecuados para los que tienen 200, 300 o 500 habitantes.

González ha abordado también la imputación de Rodrigo Rato y otros miembros de la cúpula de Bankia por la Audiencia Nacional. Ha considerado un "error fundamental" del Gobierno de Rajoy impedir que los anteriores responsables de la entidad financiera comparezcan en sede parlamentaria para dar explicaciones. El expresidente ha confesado sentir "envidia" de la reacción que han tenido países como Estados Unidos o Gran Bretaña ante situaciones similares.

El exdirigente del PSOE se ha referido también a la situación económica internacional, y ha considerado insuficiente la rebaja de tipos adoptada ayer por el Banco Central Europeo (BCE). En lugar de quedarse en un 0,75%, los tipos deberían bajar hasta el 0,25% o incluso hasta el 0%, según González, para quien el BCE debería haber tomado también decisiones políticas para evitar ataques especulativos contra la deuda soberana "hasta que esté disponible el mecanismo de intervención" comunitario. En el plano interno, el expresidente ha afirmado que los recortes del Gobierno están deprimiendo los ingresos en mayor proporción de lo que reducen el gasto, razón por la que ha augurado que "no se podrá cumplir el objetivo de déficit".