La Generalitat quiere reducir los días de asuntos propios de los funcionarios

Los detalles de la rebaja salarial a los funcionarios anunciada por el Ejecutivo catalán se van anunciado poco a poco. El portavoz del Gobierno catalán, Francesc Homs, ha admitido hoy que una de las propuestas que está sobre la mesa en el nuevo paquete de medidas de ajuste es reducir el número de días de asuntos propios de los funcionarios, conocidos como moscosos, que no tienen los trabajadores de la empresa privada.

En una entrevista en Radio 4, Homs ha asegurado que es una de las medidas que quieren debatir con los sindicatos, algo que no ha querido calificar de privilegios sino de derechos adquiridos en el transcurso de los años.  La vicepresidenta del Gobierno, Joana Ortega, aseguró ayer en una entrevista en TV-3 que la rebaja del salario de los funcionarios es una medida "temporal" y se limitará a 2012, por lo que esa reducción no se consolidará como ocurrió con la de 2010. La Generalitat solo puede tocar el complemento específico, que supone alrededor de un tercio del salario de los trabajadores públicos.

Según el portavoz del Govern, teniendo en cuenta que los funcionarios tienen, además de las vacaciones, entre una semana y 11 días de asuntos propios, tras una época de bonanza económica hay que resituar estos derechos en el contexto actual de crisis. El portavoz ha sostenido que "en la empresa privada lo ha hecho todo el mundo. En las cosas que son más prescindibles hay que ahorrar para no llegar a tocar los servicios más sensibles" como sanidad, educación y servicios sociales.

Menos concreto ha sido cuando le han preguntado si el precio de la tarjeta de transporte T-10, que actualmente cuesta 8,25 euros, podría aumentar hasta los 9 y 10 euros, alegando que el marco de medidas es amplio y que habrá que discutirlo en el seno de la Autoridad Metropolitana del Transporte.

Ante estos nuevos ajustes, el portavoz del Gobierno catalán ha indicado que entiende que la primera reacción de los sindicatos sea de "rechazo", después de que estos ya hayan movilizaciones al respecto. Sin embargo, ha pedido que se sienten a la mesa a negociar los próximos días porque, a su juicio, se trata de propuestas "asumibles" que se implementan para evitar echar a trabajadores.