La federación de padres denuncia coacciones del Gobierno Aguirre

La Federación de Asociaciones de Padres (FAPA) Giner de los Ríos, mayoritaria en la enseñanza pública madrileña, ha denunciado "coacciones" de la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid "a una treintena" de centros públicos de la región. Según ha indicado el presidente de la FAPA, José Luis Pazos, las Direcciones de Área Territorial (DAT) de Madrid han llamado a colegios e institutos para decirles "que no se puede dar información a las familias, no se pueden fotocopiar y repartir" las hojas en las que los centros explican cómo les afectan los recortes y les han instado a retirar los carteles con consignas en defensa de la escuela pública que algunos centros han colgado en las fachadas de sus edificios.

"Se están prohibiendo asambleas conjuntas con el alumnado y con los padres", según Pazos, que asegura que las DAT han indicado que estas reuniones, a las que normalmente dan el visto bueno los directores, "ahora tienen que ser autorizadas por la Administración". En respuesta, un portavoz del departamento que dirige Lucía Figar ha alegado que las DAT "han recibido quejas tanto de directores de centros como de profesores y familias de alumnos respecto a la existencia de carteles reivindicativos en sus institutos sobre la huelga".

Según la versión de la Comunidad, las direcciones de área, "en aras de preservar el normal funcionamiento de estos centros públicos" en los que, recuerdan, "estudian menores", han "comunicado" a las direcciones de los institutos "la necesidad de que se retiren". "En los centros públicos no caben proclamas ni lemas reivindicativos que puedan alterar o perturbar el desarrollo escolar del centro ni de los alumnos menores de edad", subraya Educación.

La FAPA ha hecho esta denuncia, que estudia llevar a los tribunales, en una comparecencia para presentar el informe de inicio de curso. El pasado 6 de septiembre, en una asamblea de padres, reclamaron datos a los centros sobre cómo les afectaban las instrucciones de inicio de curso que aumentan las horas de 18 a 20 horas semanales la jornada lectiva de los docentes y que, según estimaciones de los sindicatos, dejan fuera a 3.000 interinos. Durante el fin de semana han recabado y contabilizado la información enviada por 120 centros (aproximadamente un tercio del total). La FAPA rebaja el número de interinos afectados a 2.600. La Consejería de Educación, que se ha comprometido a dar una cifra concreta en los próximos días, asegura que serán menos porque el curso pasado solo se contrató a 1.700.

Según los datos facilitados hoy por la FAPA, los institutos madrileños han perdido una media de 20,75 horas de desdobles semanales. Desdoblar un aula supone dividirla en dos grupos para atender a distintos niveles en Lengua o Matemáticas, para ofrecer clases de conversación de una segunda lengua en grupos más reducidos o laboratorios en asignaturas de ciencias. La Giner de los Ríos denuncia además que hay profesores que están dando materias en las que no son especialistas y que no son afines. El "profesor comodín", según Pazos, es el de Biología y Geología, que está impartiendo clases de Plástica, Informática, Educación Física o Historia y Cultura de las Religiones en algunos de los centros que han enviado información a los padres. La consejería ha negado desde el principio de las protestas que estos casos se estén produciendo y se ha comprometido a "corregir errores" en caso de que los inspectores educativos que revisan estos días los horarios de los centros los detecten.

La queja de la FAPA va más allá. Aseguran que los recorres afectan a las guardias y que "las bibliotecas no se van a poder atender". Respecto a las clases extraescolares, "se perderán fundamentalmente las que se hacen fuera de clase", como viajes de intercambios o visitas a museos. Pazos ha asegurado hoy que, según los datos recabados, no se resienten las ratios (número de alumnos por aula). "No es cierto que, como media, estén por encima de la legislación vigente".

La enseñanza madrileña tiene convocadas tres jornadas seguidas de huelga a partir de mañana. Respecto a este punto, la FAPA señala que respalda las protestas pero ha pedido a los padres de alumnos que "lleven a sus hijos e hijas a los centros educativos y que sean atendidos por el profesorado" que no secunde los paros.