Rubalcaba reprocha a Zapatero que no consultase la reforma con el partido

El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, se ha empleado hoy a fondo para aplacar las críticas de su partido a la reforma constitucional pactada entre PSOE y PP. El candidato ha mantenido una maratoniana jornada con tres reuniones, en las que ha tenido que escuchar a quienes dentro del propio PSOE se oponen a la reforma, critican el modo en que se ha planteado o directamente reclaman que ésta sea sometida al refrendo de los ciudadanos mediante una consulta popular. Finalmente, después de un intenso debate en todos los frentes del partido, ha logrado mantener prietas las filas, tras explicar que el Gobierno no tenía otra salida para aplacar a los mercados y dar una imagen de solvencia de España. Incluso el PSC se ha comprometido a avalar la reforma, pese a que en la reunión de hoy de su ejecutiva han sido más las voces críticas que las que apoyaban la modificación constitucional. Incluso el propio Rubalcaba ha tenido reproches para el presidente del Gobierno por no haber consultado la modificación constitucional a la dirección del partido antes de hablarla con Mariano Rajoy y plantearla en el Congreso.

La jornada maratoniana arrancó con la reunión de la comisión ejecutiva federal. Allí,el candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha transmitido a José Luis Rodríguez Zapatero que él no hubiera hecho así la reforma de la Constitución, sino que lo hubiera consultado con la dirección del partido. "Yo no lo hubiera hecho así y así se lo he dicho al presidente", han asegurado las fuentes que ha reprochado al presidente Rubalcaba, quien ha considerado que él hubiera preferido que una decisión de este calibre se hubiera discutido previamente en el seno de la dirección. No obstante, también ha precisado: "La reforma es como una vacuna que hay que ponerse ahora".

Por la tarde, el ex ministro del Interior ha instado a los barones socialistas a aprobar con urgencia la reforma constitucional. "O lo hacemos ahora o no servirá de nada", ha indicado el dirigente durante una reunión de dos horas y media en Ferraz, el cuartel general del partido. Al encuentro han asistido todos los secretarios regionales, salvo el del País Vasco, Patxi López, y el de Castilla-La Mancha, José María Barreda. Era la segunda reunión del día, tras la de la Ejecutiva Federal. Los barones han respaldado en Ferraz a Rubalcaba, aunque han reclamado explicaciones sobre cómo se ha gestado la modificación constitucional y han pedido que se explique a los ciudadanos por qué no son llamados a referéndum para opinar sobre la primera modificación de calado de la norma fundamental.

El encuentro más intenso fue el que Rubalcaba celebró con los 169 diputados del grupo parlamentario, los mismos que este martes están emplazados a votar la toma en consideración de la propuesta de reforma. Allí han surgido peticiones para que la reforma fuera sometida a referéndum. Dos de los miembros del equipo parlamentario que se encargó de negociar el acuerdo con el PP sobre la reforma de la Constitución, Francisco Fernández Marugán y el José María Benegas, han defendido junto a Rubalcaba los términos de ese pacto ante los diputados y senadores socialistas que se han dado cita en el Congreso, la víspera de que la revisión constitucional inicie su tramitación parlamentaria.

El PSOE ha conseguido finalmente proyectar una imagen de unidad, aunque a costa de un intenso debate. El más intenso ha sido, sin dudas, el PSC, que ha dado su visto bueno a la reforma "por asentimiento", aunque han sido numerosas las voces, como la de la ministra de Defensa, Carme Chacón, en favor de la consulta popular. A su juicio de la que también ha sido nombrada número uno de la lista socialista por Barcelona, con la actual sensibilidad social en favor una democracia más participativa, especialmente en asuntos de gran calado político, sería conveniente dicha consulta.

El secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, ha asegurado tras la reunión de Ferraz que los barones no han criticado a Rubalcaba y han respaldado la reforma. Su homólogo de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha escrito en su cuenta de twitter: "Cuando las cosas se explican se pueden entender. Pero quienes tienen que entenderlo no somos solamente nosotros sino todos los ciudadanos". Y el líder del PSM, Tomás Gómez, ha respaldado que el candidato socialista "haya blindado el Estado del bienestar", en alusión a la iniciativa de Rubalcaba de no incluir el techo de déficit en la Constitución, como respaldaban Zapatero y Rajoy. Montilla quiso apelar a la prudencia con este tipo de reformas por las sensibilidades de Cataluña y el País Vasco.

En la cita de esta tarde con los barones, Rubalcaba ha explicado la limitación constitucional del déficit y el principio de estabilidad presupuestaria acordado entre PP y PSOE. Junto a los secretarios regionales, han arropado al candidato, los ministros de Fomento y Política Territorial, José Blanco y Manuel Chaves; y la coordinadora de campaña, Elena Valenciano. Al inicio de la reunión, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha indicado que entre los socialistas "no sólo no hay reticencias", sino que la respaldan "sin dudas".

El secretario de Organización del partido, Marcelino Iglesias, ha explicado los resultados del primero de los encuentros de hoy, el celebrado por la Ejecutiva Federal en la sede socialista de la calle Ferraz. Iglesias ha resaltado que la propuesta de reforma ha recibido de los miembros de la Ejecutiva un "apoyo total", y ha descartado celebrar un referéndum porque trasladaría una imagen de incertidumbre a los mercados. La agencia Efe asegura que Rubalcaba ha transmitido ubalcaba, le ha dicho hoy al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que él no hubiera hecho así la reforma de la Constitución para fijar una disciplina de déficit, sino que lo hubiera consultado con la dirección del partido.

"Momentos excepcionales, soluciones excepcionales", ha dicho respecto a la modificación del artículo 135 de la Constitución, admitiendo así el carácter extraordinario de la medida. Iglesias no ha ocultado que la reforma responde a un intento de calmar a los acreedores, y ha justificado la negativa a celebrar un referéndum, como demanda parte de la ciudadanía y del propio PSOE, en que la Constitución no exige celebración de la consulta, y en que esta restaría credibilidad precisamente ante los mercados. "El Gobierno ha tenido que hacer una reforma para transmitir que España es un país serio que va a cumplir sus obligaciones" y si se celebrara el referéndum "se transmitiría incertidumbre a quienes queremos transmitir esa certidumbre".

De celebrarse una consulta ciudadana la reforma no estaría cerrada hasta el mes de noviembre, ha explicado Iglesias, de forma que la medida perdería eficacia. El Gobierno ha utilizado el método exprés porque quiere transmitir seguridad a los mercados de cara a un octubre que se avecina convulso, con Italia, el otro país al borde del rescate, en busca de financiación para afrontar su deuda. 

Iglesias ha insistido en el alcance internacional de la crisis y en que es previsible un recrudecimiento de los ataques especulativos contra la deuda soberana de algunos países del euro en los próximos meses. Estas "turbulencias" en los mercados de "capitales y deuda" han condicionado, según Iglesias, el planteamiento de esta reforma y otras decisiones del Ejecutivo relacionadas con el mercado laboral, todas ellas asumidas con "gran responsabilidad" por el partido.

El secretario de Organización del PSOE también ha admitido que la urgencia ha marcado las decisiones asumidas los últimos días. Lo primero, ha dicho, era actuar. Lo siguiente es explicar, tarea a la que los socialistas pretenden consagrar el día de hoy.

"Creemos que no es una claudicación" ante los mercados, ha dicho Iglesias sobre la reforma que limita el déficit, y en consecuencia, el gasto público. Ha insistido, además, en diferenciar entre el planteamiento de "estabilidad presupuestaria", válido para ciclos económicos largos, y el de déficit cero, del que se aleja, según Iglesias, la reforma planteada. "Tener mucha deuda es la peor política", la "más dramática para sacar adelante políticas de cohesión social". Por eso, tanto Zapatero como Rubalcaba han insistido en la necesidad de tener cuentas saneadas, ha asegurado Iglesias.

Respecto a las discrepancias surgidas en el seno del partido y del propio grupo parlamentario, el portavoz socialista ha resaltado que en la Ejecutiva ha habido un acuerdo "muy amplio" al respecto. "El Grupo Socialista es rocoso, sólido y cohesionado. Hay debate pero posiciones firmes de apoyo al Gobierno y al partido", ha zanjado el secretario de Organización. Iglesias ha asegurado que, mientras él ha estado presente en la reunión, ningún miembro de la Ejecutiva Federal ha pedido que se convoque un referéndum sobre la reforma constitucional.

Sobre el papel de Rubalcaba, Iglesias ha destacado que "ha logrado introducir flexibilidad" en la reforma, de forma que el texto consensuado con el PP posibilite "excepciones en momentos difíciles". "No hablamos de déficit cero, como piden otros. Sí de estabilidad", ha remarcado, antes de concluir su intervención con un anticipo de su agenda vespertina, en la que se incluye un encuentro con los diputados socialistas: "Los diputados y senadores, sobre los que recae la soberanía nacional, tendrán que asumir su responsabilidad".

Sorpresa en el PSOE

“Son días muy difíciles, yo lo estoy pasando fatal. Me crea mucho desasosiego tener que apoyar esta reforma... Pero lo haré, porque me crea más desasosiego no respaldar al partido”. Lo dice uno de los dirigentes del PSOE que hoy intervendrá ante la Ejecutiva Federal para criticar la reforma constitucional pactada en dos días por su partido con el PP. La crítica —al menos la suya— se quedará en eso, en crítica interna.

Y eso es lo que pretende lograr Rubalcaba: convencer a los más desconcertados de los suyos de que el PSOE debe apoyar como una piña, por “responsabilidad”, la reforma constitucional que pone límite al déficit público, por mucho que a algunos les parezca una renuncia a su ideología en pro de los mercados.

Guillermo Fernández Vara, expresidente de Extremadura, que esta tarde se reunirá con el candidato junto al resto de secretarios generales de las federaciones socialistas, pedirá a Rubalcaba que haga un "ejercicio de pedagogía" para explicar la reforma. La portavoz del PSOE extremeño, María Ascensión Murillo, ha explicado en rueda de prensa que su federación sabe que hay "razones de peso" y que "no hay tiempo" para convocar un referéndum, pero considera que es necesario explicar esta decisión para que los españoles "entiendan" la medida.

Críticas de veteranos y de las bases

Las críticas abiertas de veteranos socialistas a la reforma se han aplacado en los últimos días, tras conocerse que el texto final no introduce en la Constitución la cifra concreta del déficit, algo que el PSOE atribuye a la intervención de Rubalcaba en la negociación. Pero las dudas subsisten, también por el hecho de que una reforma de tanto calado saldrá adelante en dos semanas, sin casi debate y sin referéndum.

El eurodiputado y exministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, una de las voces críticas del partido, ha asegurado a su llegada a la reunión de la mañana en la sede del PSOE que el partido debe "emplearse a fondo" en explicar a los españoles por qué se debe hacer la reforma constitucional. "Debemos explicar a los españoles que la Constitución ha madurado plenamente y que podemos acometer las reformas constitucionales con normalidad democrática como hacen otros partidos de nuestro entorno", ha insistido ante la prensa reunida a la puerta de Ferraz.

“El texto, aunque se ha suavizado, sigue siendo muy negativo. Introduce en la Constitución un principio económico totalmente neoliberal. Esta es una reforma ideológica y nada neutra, que requiere un debate sereno; no así, a toda prisa, en una semana de agosto”, protesta el diputado socialista Manuel de la Rocha, vinculado a UGT. Él reclamará esta tarde en la reunión del grupo que el partido permita la convocatoria de un referéndum. Y cree que “bastantes compañeros” coincidirán en esa petición. El gallego Xavier Carro y los miembros de Izquierda Socialista José Antonio Pérez Tapias y Juan Antonio Barrio de Penagos han dicho ya que son partidarios del referéndum.

De la Rocha recuerda que Rubalcaba está haciendo campaña prometiendo una mayor cercanía a la calle, cuando “muchos ciudadanos se despegan de la política porque la política se despega de ellos”. Es su oportunidad, afirma, para ponerlo en práctica.

La comisión ejecutiva del PSC ha celebrado hoy una reunión de su ejecutiva tras las vacaciones de verano. Entre otros temas de actualidad política, los socialistas catalanes han debatido su postura sobre la reforma constitucional, y han decidido respalda, tras un intenso debate.