Arranca el debate indignado sobre el estado de la nación
El Movimiento 15M regresa a Sol para realizar su propio análisis de la marcha del país Hoy ha tocado economía y derechos sociales, y mañana, política y ciudadanía
Cientos de personas han asistido esta tarde a lo que el Movimiento 15-M ha bautizado el Debate del pueblo, una suerte de debate del estado de la nación alternativo que se celebró a 300 metros del Congreso de los Disputados y un día más tarde del oficial. Han tratado asuntos de economía y derechos sociales. Mañana, también a las 19.00, hablarán de política y ciudadanía.
La propuesta, convocada por la asamblea del barrio de Arganzuela surgida del 15-M y abrazada por el resto de los indignados, ha arrancado sobre las 19.20 ante unas 500 personas, a las que poco a poco se han ido sumando más. Los organizadores han instalado en la plaza megafonía y dos altavoces, han pintado una suerte de gradas en el suelo, han repartido cartones para proteger los traseros de los asistentes del calor abrasante que manaba del asfalto y han recurrido al tradicional sistema para combatir el calor de los acampados: agua pulverizada. La comisión de comisión de los acampados se ha instalado en una esquina con mesa y silla para poder retransmitir a través de Twitter la marcha del debate.
Al comienzo del debate una joven algo nerviosa ha leído un comunicado que también se ha distribuido entre los asistentes titulado ¿Por qué el Debate del Pueblo sobre el Estado de la Nación?. “Porque queremos denunciar la brecha de separa a los ciudadanos de los representantes políticos. Porque los problemas de los ciudadanos no encuentran eco en el debate del Congreso de los Diputados, lastrado por los cálculos electorales y el marketing político. La fractura económica y social que está provocando la crisis resulta incompatible con un debate institucional plagado de insultos y descalificaciones, perfectamente previsible, en cuyo guión no hay cabida para dar respuesta a las acuciantes reivindicaciones de los ciudadanos. Por eso queremos propiciar el debate y el pensamiento críticos. No nos resignamos a aceptar sumisamente el discurso interesado que sostiene que sólo existe una política posible (…). Con este debate reafirmamos nuestras convicciones democráticas frente a quienes aplauden y propician el poder espurio de los mercados (…) Si el poder político no escucha el clamor que surge de iniciativas como ésta de hoy, los escasos 300 metros que distan entre este debate y el del Congreso de los Diputados corren el riesgo de convertirse en un abismo insalvable”.
Durante la primera hora el debate no ha sido tal y ha consistido en la exposición de diversos problemas por parte de varias personas que han hablado unos 15 minutos cada uno. “Las reflexiones de ponentes y colectivos, cuya autoría corresponden en exclusiva a quienes las formulan, contribuirán a alimentar el necesario debate”, se ha adelantado ya en el folio que se ha entregado a los asistentes.Han hablado representantes de la comisión de economía surgida de la acampada de Sol y también de asociaciones como Plataforma por la nacionalización de Bankia o la Asociación de Usuarios de bancos y Cajas (ADICAE).
Han estrenado este ‘debate del pueblo’ tres portavoces de la comisión de economía del 15-M, que se reúne todos los lunes en la plaza del Carmen y cuyos miembros se han dividido por áreas de debate (vivienda, sistema financiero, política económica, empresas y relaciones globales). El primero en intervenir ha dedicado su exposición a explicar “por qué el pacto del euro no ayuda a los ciudadanos”. “En el Congreso de los Diputados hablan de democracia y nosotros hablamos de golpe de estado de los mercados”, ha dicho. Y ha arrancado aplausos cuando ha añadido: “Por qué quieren rescatar a Grecia? Porque si cae Grecia cae el banco más importante de Europa, el Deutsche bank”. “Ellos quieren más flexibilidad laboral, es decir más horas, menos sueldos y más tasas de ganancia”, ha dicho antes de terminar. “Madre mía”, se le ha escapado a un señor mayor del público que rompió a aplaudir.
Los diversos ponentes han pedido que se retiren la reforma laboral y el pensionazo, la dación en pago para saldar la deuda hipotecaria, que se aumente el salario mínimo, la abolición de los paraíses fiscales o un impuesto que grave las transacciones especulativas. También ha habido propuestas muy imaginativas, como cambiar el color de los billetes de 500 “para que quienes tienen maletines repletos se los coman y revienten” o boicotear el consumo todos los lunes. Los indignados han intentado en varias ocasiones mandar un saludo (“todos estamos con vosotros”) a los manifestantes griegos a través de internet, pero había problemas en la conexión.
El debate alternativo no ha impedido que la vida en la Puerta del Sol siguiera su curso. Han tocado mariachis, un doble del pirata Jack Sparrow se ha retratado con decenas de turistas blandiendo un sable y un mimo bañado en pintura dorada ha permanecido inmóvil en una esquina.
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