Vetar el veto

Los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas gozan del poder de bloquear definitivamente cualquier resolución que vaya contra sus intereses y los de sus aliados. El veto ha marcado la historia del Consejo, pero se ha quedado obsoleto y es ineficaz. Al mismo tiempo se necesitan más miembros permanentes que representen a África, América y Oceanía. Si el veto no se puede eliminar, extenderlo a otros miembros sería un grave error. La clave está en redefinirlo, limitando su uso. El instrumento adecuado sería una solicitud de Opinión Consultiva al máximo tribunal de Naciones Unidas, la Corte Internacional de Justicia. En una frase: vetar el veto.

Luis Peraza Parga. San Diego (California, EE UU)

Peligro en Austria

Un partido de extrema derecha austriaca puede vencer las elecciones este próximo domingo. La esperanza pasa porque, aún no logre acuerdos para alcanzar la gobernanza. La extrema derecha austriaca, con un discurso que incide especialmente en el fenómeno migratorio en ese país, ya ha alcanzado dos veces el gobierno con anterioridad. En las dos ocasiones hubo de anticipar su salida del ejecutivo. La última, como consecuencia de una estúpida trampa de corrupción que le fue tendida al canciller Sebastian Kurz en Ibiza. El miedo escénico ahora pasa porque un fenómeno que acaece en una gran parte de Europa, así como en Estados Unidos, afecte del mismo modo a la que fuese cuna del nazismo. ¿Qué estamos haciendo tan mal para que algo así pueda suceder? Ante tanta dispersión política, hermosa consecuencia de la libertad, sobrevienen gobiernos extremadamente débiles, y en algunos casos tremendamente peligrosos.

Enrique López. Vitoria

El falso Brad Pitt

El lunes el periódico nos informó del final de una operación policial para acabar con una estafa en todo el país. Los detenidos aprovechaban la vulnerabilidad de personas con “carencias afectivas y en estado depresivo” para hacerlas creer que mantenían una estrecha relación con el famoso actor Brad Pitt. Al ganar confianza es cuando pedían a las víctimas dinero. Me parece vergonzoso que hoy en día aún se utilice la inestabilidad emocional para sacar provecho de personas. Por desgracia, esta no es la primera vez que ocurre algo así.

Fiona Velardo. Gavá (Barcelona)

Frustración y esperanza

“Somos una gota en el océano”. Esas fueron las palabras que aquel hombre de mirada cansada eligió para explicarme en qué consiste su trabajo como docente. “Sabemos que muchas cosas están mal. No sabemos cómo hacer para cambiarlas. Pero aquí estamos, intentando”. Intentando. Veo en sus ojos la misma cantidad de frustración que de esperanza. Quizás de eso se trate al final de todo: de mantener el equilibrio entre esos extremos, sin entregarse por completo a ninguno de ellos. Ser una gota en el océano y, aunque asuste la inmensidad de lo inabarcable, seguir confiando en la potencia trasformadora de lo minúsculo.

Constanza Taccari. Valencia