Los memes y la derecha
Los lectores opinan sobre la crisis en el PP, el deterioro del servicio ofrecido por Renfe a los usuarios, y el dolor generado por una pérdida familiar
Creo que la mayoría de los memes de ideario político son fundamentalmente patrimonio de la derecha y que van dirigidos casi todos a lo único, el acoso, degradación y derribo del gobierno de turno. Recientemente, he recibido uno en el que Pablo Casado, sobre el escenario desdibujado de una plaza de toros, lleva a hombros a un Pedro Sánchez, vestido de torero, que responde con los brazos en alto a la cerrada ovación de un público encantado con su faena. La lectura de la imagen tiene una primera interpretación muy sencilla, y demuestra que la derecha no pierde ni un segundo en su espuria tarea. Pero lo grave es que el cegato autor, y lo que representa, tenga interiorizado sobre todo que el principal partido de la oposición, un partido de gobierno y que ha gobernado ya bastantes años, el único mal que está infligiendo a su país con todo lo que le está ocurriendo estos días es aupar al actual presidente del Gobierno y contribuir a mantenerlo en el poder. ¿El ideario político de un “nuevo partido” era esto, es esto? ¡Es una pena, este país sin remedio!
Manuel Huerta Anta. Vigo (Pontevedra)
Desolado
Sí, estoy desolado. Para mí, es uno de esos días en los que no sabes de qué manera salir del embrollo. Y todo por los hechos ocurridos recientemente con protagonistas del PP de máximo nivel. Y no lo estoy por las actuaciones a las que ya nos tienen acostumbrados. Lo estoy porque estos políticos de medio pelo les están poniendo una alfombra roja y abriéndoles las puertas de par en par a los ultras de Vox. Dice un viejo refrán que “A río revuelto, ganancia de pescadores”. Pues eso es lo que tendrá la ultraderecha, ganancia de votos. Y no pocos. No hay más que ver sus caras y sus sonrisas de oreja a oreja. Mucho me temo que se van a cobrar cumplida venganza de los desaires del PP. Lo malo es que, si les sale bien, lo pagaremos los sufridos españoles. Veremos.
Félix Moreno Quevedo. Almansa (Albacete)
Clientes, no mercancía
Renfe nunca había cobrado por escoger un asiento hasta que llegó la pandemia. Cuando más vulnerables éramos todos, la compañía exigía al usuario ocho euros por trayecto si este quería elegir donde sentarse. Esta exigencia la sigue manteniendo y, de no hacerlo, sabes que, con mucha probabilidad, viajarás en asientos enfrentados o separada de tu acompañante. El servicio que ofrece Renfe se ha degradado y es más caro. El transporte público de viajeros se parece cada vez más a un traslado de mercancías en el que todos somos bultos.
Ana Isabel Gómez Sánchez. Santander
De ‘ser’ a ‘fue’
Mi padre murió la mañana de un sábado con cielo nublado. “No vas a disfrutar ni de tu día de descanso”, hubiese dicho con ese sentido del humor sin filtro que tanto le caracterizaba. Fue la primera vez en toda mi vida que surgió en mí ese instinto egoísta que todo ser humano alberga en su interior. El mismo que me hacía sentir rabia e injusticia al ver a los abuelos de 80 años pasear por las calles cuando él ni siquiera había cumplido los 49. Con 23 años, en solo tres días, aprendí más lecciones que en toda mi vida. Lo rápido que uno pasa de ser a fue; que la familia te remueve las entrañas más profundas aunque a veces no lo merezca y que siempre, siempre, mientras hay vida, hay esperanza.
Sandra Martínez Martínez. Guadix
