En recuerdo a un gran lector de EL PAÍS
Un homenaje a un fiel comprador del diario, las alabanzas a la sanidad pública y el problema de las redes sociales son los temas de las cartas a la directora de hoy
Hace dos meses que se fue un gran lector de EL PAÍS, aunque siendo leales a la verdad, el Alzhéimer se lo había llevado hacía años. Si por alguna circunstancia se quedaba sin el ejemplar del domingo, lo buscaba por los quioscos de Madrid el ansiado periódico. Leerlo de cabo a rabo era su tarea semanal. Seleccionaba algunos artículos que me hacía leer para comentarlos. Él quería que hubiera sido periodista, y que por supuesto, hubiera escrito para EL PAÍS. Papá, estas líneas son para ti. Mientras lo lees, suena de fondo nuestra canción... “esta tarde vi llover... y no estabas tú”.
Carmen Peñafiel Arias. Villanueva de la Cañada (Madrid)
¡Viva la sanidad pública!
Hace una semana recibí el alta del Hospital Clínico Universitario de Valladolid tras una operación a corazón abierto. Durante mi ingreso, he visto situaciones estresantes debidas a la escasez de personal, pero nunca he dejado de ver una entrega sin reservas de todos los sanitarios, siempre profesionales, eficaces y empáticos. A pesar de todas las dificultades objetivas, todos, del primero al último, se merecen un 10. Y también se merecen que quienes gestionan el dinero público inviertan sabiamente en recuperar lo perdido por la sanidad pública en los últimos tiempos y reconozcan, de una vez por todas, que la salud no puede ser un negocio privado. Con mi más sincero agradecimiento ¡viva la sanidad pública!
Francisco Sánchez Aguado. Segovia
Las redes sociales
El problema mayor de las redes sociales no es los datos que nos roban, sino el tiempo que nos roban.
José A. Salvador Polo. Valladolid
