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ANATOMÍA DE TWITTER
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

España: carne de meme

Todavía dura el bullicio con Urdangarin, mientras los políticos continúan con los ataques a Alberto Garzón

Manuel Viejo
Macrogranjas España
El presidente del PP, Pablo Casado, toca un ternero, durante su visita a una explotación ganadera extensiva de vacuno en Navas del Marqués (Ávila), el 14 de enero.Rafael Bastante (Europa Press)

Son días complicados. Hay cuñados que ponen patas arriba un país. España es así. El cuñado real por excelencia es Iñaki Urdangarin, que hace unos días ha confirmado que la mujer con la que paseaba por una playa francesa no era la infanta Cristina, ya que en las fotos no estaba lo suficientemente claro al no parecerse en nada la una a la otra. “Estas cosas pasan”, ha dicho él. Filosofía Daddy Yankee: “Lo que pasó, pasó”.

Una tuitera escribió: “Cristina, hay más imágenes para ti”. Tiempo al tiempo. Hay tertulianos mediáticos que hablan ―ojo aquí― de “la nueva amiga de Iñaki”. Con amigas así no hacen falta amantes reales. Aunque quizá no sea una amiga, sino una allegada de las de la covid. A saber. El invitado estrella de El Hormiguero y de La Sexta Noche, Miguel Ángel Revilla, fue muy preciso durante aquellas Navidades restrictivas de 2020: “Que los allegados sean allegados de verdad, y no llegados”. Lo mismo estamos ante una llegada de la tercera república.

Paula Echevarría, por cierto, dijo algo parecido a la frase de Urdangarin cuando había rumores de crisis con David Bustamante: “Pasan cosas en mi casa”, dijo. Pero allí había dos hombres y un destino. El amor en tiempos de Rigoberta Bandini: “Y a ver qué pasa, porque algo pasa”.

Ha habido tanto alboroto, que lo mejor fue la respuesta que dio un compañero del bufete de abogados de la nueva pareja real en Sálvame: “Tardamos cinco minutos en comprar la revista [Lecturas], pero ellos lo que tienen que hacer es trabajar”. Con compañeros así tampoco hacen falta amigos. Y se lio el cachondeo en Twitter. Javier López, del diario 20 minutos, imaginó la posibilidad de que apareciesen ciudadanos por las calles diciendo todo el rato lo que hay que hacer. “Pagaría por ello”, escribió. Eso no está pagao.

En Instagram también hubo mucho bullicio con la exclusiva, pero los políticos han guardado silencio, que quizá es la mejor opción. Será porque todavía colean las carnes de Alberto Garzón. Conviene recordar el tuit que lanzó el portavoz del PP en Euskadi, Carlos Iturgaiz, hace unas semanas. Incisivo, subió una foto de un chuletón bien rojo con la silueta de la península ibérica a su perfil. Art Attack político. Ingenio o libertad. El guirigay llegó porque no había carne en las Islas Baleares y mucho menos en las Islas Canarias. Tampoco en Ceuta y Melilla. A Murcia y a Cataluña les tocó el tocino. La periodista Lucía Taboada fue muy precisa: “El PP es carne de meme”. Cómo estarán las cosas estos días que hasta Vox ha pedido un poco de contención a los populares a la hora de criticar a la patria. “Nos hemos pasado España”, comentó en Twitter el usuario @PolloEspídico al enterarse. Absténganse veganos.

Iturgaiz, en gran estado de forma viral, fue el otro día a una granja, que están batiendo absolutamente todos los récords de visitas políticas, y dijo: “Garzón pone en peligro a la carne española y, por tanto, a la vasca”. Gracias, Iturgaiz, por tanto. El nuevo eslogan del PP en Twitter para Castilla y León es “Más ganadería y menos comunismo”. El de Vox es “Siembra”. Si son listos en el Gobierno, el de Podemos tendría que ser “al punto” y el de PSOE “poco hecho o un punto menos”. Bendito día en que el ministro de Consumo comunista—que tiene tela también― concedió una entrevista a The Guardian.

Alfonso Fernández Mañueco, el candidato del PP en Castilla y León, donde llevan gobernando 34 años, y van para 38, aunque quieren aparentar cuatro, dijo el otro día que Garzón se había metido con la hostelería. Es mentira. Todo viene por una campaña en Twitter sobre el táper. En fin. Tiempos convulsos. Ya lo dijo el tuitero @Karistofsky: “A la guerra con Rusia y en invierno. ¿No prestasteis atención en Historia o qué?”.

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Sobre la firma

Manuel Viejo
Es de la hermosa ciudad de Plasencia (Cáceres). Cubre la información política de Madrid para la sección de Local del periódico. En EL PAÍS firma reportajes y crónicas desde 2014.

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