El peligro en las aceras

Antes enseñábamos a los niños a mirar antes de cruzar la calle, ahora el peligro está en las aceras. Antes de salir de casa hay que mirar a ambos lados para evitar ser atropellados por un patinete o bicicleta a alta velocidad. Los niños, bien pegados a los padres, porque un pequeño movimiento de trayectoria puede implicar ser embestido por una máquina. Los efectos en el cuerpo de un niño o un anciano son devastadores. Además, muchas agresiones hacia los peatones no están registradas ya que no llega a producirse una colisión, pero el acercamiento desmesurado haciendo eslalon violenta a los viandantes. Pero no pasa nada porque está todo permitido y la falta de empatía de los conductores de estos vehículos hace que las aceras sean lugar de riesgo. Han anunciado medidas sobre el uso del patinete, pero si no se aplican medidas disuasorias no se puede esperar que la ley se cumpla.

Cristina Martí Rocha. Barcelona