Quema de neumáticos
Comprendo perfectamente la preocupación, angustia o desesperación de esos trabajadores que en Cataluña y en Galicia ven en peligro sus empleos. Me parece muy bien, por tanto, que hagan oír sus voces, que protesten y se manifiesten tratando de evitar que la amenaza se convierta en realidad. Lo que no acabo de entender es qué tienen que ver con esto los neumáticos. Si creen que el humo producido va a impresionar a unas multinacionales cuyas sedes están a miles de kilómetros, creo que se equivocan. El mundo tiene millones de problemas. El de estos trabajadores es uno de ellos. Pero también lo es la contaminación de la atmósfera, cuyas consecuencias venimos sufriendo desde hace años. Desde este punto de vista, la decisión de quemar neumáticos no parece de las más afortunadas.
Armando Alfonso López. Santa Cruz de Tenerife
