La UE quiere cerrar las vías de entrada de la droga y frenar el reclutamiento de jóvenes por el crimen organizado
La Comisión Europea presenta su nueva estrategia contra las drogas ilegales, que asegura están llevando al continente a un “punto crítico”


Europa tiene un problema de drogas y la situación está llegando a un “punto crítico”. Pero Europa también está dispuesta a “contraatacar”, ha asegurado el comisario de Interior y Migración, Magnus Brunner, al presentar la nueva estrategia europea contra el narcotráfico y un plan de acción “global” ante este flagelo. Unas medidas con las que Bruselas pretende, entre otros, frenar la entrada de narcóticos antes incluso de que lleguen a las fronteras europeas mediante alianzas internacionales y mayores controles externos, incrementar la seguridad en puertos y reforzar la detección de drogas introducidas en paquetes de correo, pero también actualizar la legislación europea o impedir el reclutamiento de jóvenes vulnerables por las mafias de la droga.
“La UE no va a permitir que las redes criminales inunden nuestras calles con drogas baratas, alimentando la delincuencia violenta y socavando la salud y la seguridad en Europa”, ha afirmado Brunner al presentar los nuevos planes europeos para combatir un tráfico ilícito que, ha recordado, supone “una grave amenaza para el bienestar de los europeos, así como para la seguridad de Europa en su conjunto”: según la Comisión, unos 7.500 ciudadanos europeos pierden la vida al año por el narcotráfico, “por no hablar del derramamiento de sangre, la violencia, la corrupción y el daño social que conlleva el tráfico ilegal de drogas”, ha recordado Brunner. Lo ha hecho desde la capital de Bélgica, un país especialmente afectado por la violencia de las drogas en los últimos años y en donde algunos jueces han levantado ya la voz de alarma sobre el peligro de que se convierta en un narcoestado. Hace menos de dos semanas, miles de personas salían también a la calle en Marsella para protestar por el asesinato de Mehdi Kessaci, hermano de un político y activista contra el narcotráfico que plaga la segunda mayor ciudad de Francia.
Por todo ello y por más casos que se repiten en múltiples puntos del territorio europeo, la UE necesita una estrategia “global” que combata este flagelo y a las mafias que se benefician de ello, ha subrayado el austriaco: por un lado, Bruselas ha anunciado una actualización de su estrategia plurianual contra la droga, con medidas para mejorar la detección y prevención de amenazas, medidas “más estrictas” contra el crimen organizado o alianzas reforzadas con terceros países —especialmente los latinoamericanos, desde donde procede buena parte de la cocaína que inunda Europa—, así como la preparación de una nueva legislación para mejorar la lucha contra la delincuencia organizada en toda la UE.
Además, la Comisión ha presentado este jueves un plan de acción con 19 “acciones prioritarias” de corto y medio plazo que buscan reforzar la seguridad, así como desarticular las rutas y los modelos de negocio de los narcotraficantes.
Una de estas medidas se centra en los jóvenes, auténtica carne de cañón de las mafias. Bruselas quiere crear una plataforma europea de expertos para abordar el reclutamiento en línea y “evitar que los jóvenes se vean arrastrados al tráfico de drogas”. Este tipo de reclutamiento es una “preocupación creciente” en toda la UE, señala el texto de la iniciativa, que alerta de que los grupos criminales “buscan activamente” a este tipo de menores vulnerables, sobre todo en zonas económica o socialmente desfavorecidas, para utilizarlos como “activos prescindibles y de bajo riesgo”. En este marco, las plataformas en línea y las redes sociales “aceleran” el problema, ya que son usadas para “captar, manipular y reclutar a menores con el pretexto de ofrecerles dinero rápido o crearles un sentido de pertenencia”.
Al mismo tiempo, para 2026, la Comisión quiere tener lista una “caja de herramientas” que proporcione a las autoridades nacionales, educadores, a trabajadores sociales y a actores de la sociedad civil “herramientas basadas en la evidencia para la detección temprana, la intervención y el fomento de la resiliencia con el fin de evitar que los menores de comunidades en riesgo sean reclutados por grupos delictivos”.
Además de reforzar la cooperación con terceros países y la seguridad en puntos de entrada de la droga como los puertos —ahora también se propone vigilar estrechamente el envío de drogas ilícitas a través de correos y servicios de mensajería—, Bruselas también se propone afrontar la creciente amenaza que suponen las drogas sintéticas —con una producción interna creciente en países como Bélgica o Países Bajos— y los precursores.
Porque si bien la cocaína sigue siendo la droga más traficada en Europa —419 toneladas incautadas en 2023— y consumida (2,7 millones de jóvenes de 15 a 34 años reconocieron haberla consumido el año pasado), las drogas sintéticas son otro “desafío” importante para el Viejo Continente. Cada año, recuerda la Comisión, las fuerzas del orden desmantelan 500 laboratorios de producción de drogas con precursores de diseño —sustancias químicas sin uso legal conocido— que el crimen organizado introduce de contrabando en la UE. El riesgo no es solo el evidente de salud humana: la producción de un kilo de MDMA genera aproximadamente 58 kilos de residuos tóxicos, subraya Bruselas.
Por ello, la Comisión propondrá una nueva legislación sobre precursores —la actual data de 2020— que aborde también el problema de los precursores de diseño hoy en día utilizados para eludir los controles existentes. De igual manera, creará entre otras medidas una base de datos de referencia sobre sustancias y elaborará una guía para el desmantelamiento seguro de laboratorios ilícitos, además de aumentar la cooperación con aliados internacionales para “desmantelar la producción, desvío y el tráfico ilícitos de precursores de drogas, incluidos los precursores de diseño”.
“Al garantizar medidas sólidas contra los precursores de diseño y simplificar los procedimientos para el comercio legal, estamos reduciendo las oportunidades para la fabricación ilegal de drogas y protegiendo tanto a nuestras comunidades como a las empresas legítimas”, ha señalado al respecto el comisario de Comercio, Maros Sefcovic.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Sobre la firma






























































