Jacob Chansley, símbolo del asalto al Capitolio, dice que comprará armas tras el indulto de Trump

Jacob Chansley, también conocido como el chamán de QAnon, que se convirtió en símbolo del asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 al ser fotografiado con un casco con cuernos, la cara pintada y el pecho descubierto, dijo el lunes que va a comprar algunas armas después de haber sido indultado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.

“ACABO DE RECIBIR LA NOTICIA DE MI ABOGADO... ¡TENGO UN INDULTO, NENE! ¡¡¡GRACIAS PRESIDENTE TRUMP!!!”, tuiteó en X, la red social propiedad de Elon Musk. “¡¡¡AHORA VOY A COMPRAR ALGUNAS PUTAS ARMAS!!! ¡ME ENCANTA ESTE PAÍS! ¡¡¡¡DIOS BENDIGA AMÉRICA!!!! Los del 6 de enero están siendo liberados y la justicia ha llegado... ¡Todo lo hecho en la oscuridad saldrá a la luz!”, añadió.

Trump concedió un indulto general a los más de 1.500 condenados, procesados e investigados por el asalto al Capitolio. A 14 de ellos les conmutó las penas de prisión por una sentencia ya cumplida. Al resto, les concedió un perdón pleno e incondicional por sus actos de aquel día.

Entre los que han recibido el perdón está Chansley, que fue condenado en noviembre de 2021 a 41 meses de prisión y que ya había sido puesto en libertad en mayo de 2023. En septiembre de 2021, Chansley se declaró culpable de un delito grave de obstrucción de un procedimiento oficial en un acuerdo de culpabilidad que permitió el sobreseimiento de otros cinco cargos contra él. El Tribunal Supremo de Estados Unidos, de mayoría conservadora, sentenció más tarde en el caso de otro acusado que ese tipo delictivo no era aplicable al asalto al Capitolio.

Tras el indulto, Chansley concedió una entrevista a la BBC en la que la presentadora le preguntó si había entrado en el Capitolio para intentar anular las elecciones en que había ganado Joe Biden frente a Donald Trump. “No entré en el edificio por esa razón. Y el hecho de que usted siga pensando que lo hice solo demuestra lo distorsionada que está la lente de los medios de comunicación”, contestó.

La entrevistadora le preguntó entonces por su declaración de culpabilidad en la que admitió que había intentado obstruir un procedimiento oficial (el procedimiento era la certificación de la victoria de Joe Biden en las elecciones de 2020). Chansley respondió citando la sentencia del Tribunal Supremo.

La entrevistadora le preguntó sobre su reacción al ser indultado por Trump. “Recibí la noticia de mi abogado cuando estaba en el gimnasio y salí a la calle y grité libertad a pleno pulmón y luego di un buen grito de guerra de nativo americano”, dijo.

Ante la pregunta sobre si se arrepentía de sus actos, contestó airado: “¿Ah, sí? Quiero que pienses en algo. Los burlones de los medios de comunicación y el Gobierno me demonizaron. Me convirtieron en un paria social. Me adjuntaron cosas como QAnon, teórico de la conspiración, supremacista blanco, insurrecto, racista, homófobo, terrorista. Me adjuntaron todas esas etiquetas, mi imagen, y luego me encarcelaron durante 27 meses, diez y medio en confinamiento solitario. Y luego me soltaron al público como un paria social sin capacidad para poseer un arma de fuego. Así que en realidad nunca puedo llevar un arma si hay un tiroteo. Siempre tengo que llevar un cuchillo a un tiroteo. Y te das cuenta de lo malo que es eso, ¿verdad?”.

Perdones y conmutaciones

Trump concedió un indulto general a todos los protagonistas del asalto al Capitolio. Los que recibieron el perdón pleno quedan liberados de antecedentes y tienen la posibilidad de comprar un arma. Entre los 14 casos en que el indulto se concretó en una conmutación de pena está el del líder de los Oath Keepers, Stewart Rhodes. Rhodes, condenado a 18 años por conspiración sediciosa y otros delitos, se presentó el miércoles en el Capitolio, al día siguiente de ser excarcelado gracias a la conmutación de la pena.

Defendió sus acciones ese día y no asumió ninguna responsabilidad en el asedio violento que detuvo la certificación de las elecciones de 2020. “Yo no dirigí nada. Así que, ¿por qué debería sentirme responsable de eso?”, dijo Rhodes, según recoge Associated Press.

Rhodes se detuvo en un Dunkin Donuts, dentro del edificio de oficinas de la Cámara en el complejo del Capitolio, antes de pronunciar una larga defensa de sí mismo y de sus acciones. Con un sombrero de Trump 2020, dijo que presionaría a Trump para que le concediera un perdón completo. “Creo que todos nosotros deberíamos ser perdonados”, señaló.

La visita sorpresa de Rhodes también se produjo el mismo día en que el presidente republicano de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, reactivó un comité especial para investigar los disturbios, un esfuerzo por defender las acciones de Trump ese día y disputar el trabajo de la comisión del asalto al Capitolio. Johnson dijo que no iba a cuestionar la decisión de Trump de indultar a los amotinados: “Creemos en la redención, creemos en las segundas oportunidades”, afirmó.