El primer ministro de Groenlandia se abre a una mayor cooperación con Estados Unidos
El vicepresidente electo de EE UU, J. D. Vance, afirma que no hay interés en el uso de las armas en el territorio dependiente de Dinamarca
El primer ministro de Groenlandia, Mute Bourup Egede, aseguró este lunes en una rueda de prensa en Nuuk, capital de Groenlandia, que su Gobierno se abre a una mayor cooperación con Estados Unidos. “Tenemos que negociar con EE UU. Hemos iniciado un diálogo y empezado a explorar las posibilidades para cooperar con [el presidente electo, Donald Trump]”, aseguró, según recogió la agencia Efe. El Gobierno autónomo de Groenlandia, dependiente del Reino de Dinamarca, gestiona por sí mismo todas las competencias excepto las de Defensa y las de Asuntos Exteriores.
Estas declaraciones de Egede llegan días después de que Trump, el 7 de enero, repitiera su interés por controlar Groenlandia, sin excluir, como aseguró, el uso de la fuerza o el de las presiones económicas. “Es importante que no haya un conflicto militar. Fue preocupante escucharlo la primera vez, pero el vicepresidente [electo de EE UU, J.D. Vance,] declaró este domingo que no hay interés en el uso de las armas”, tranquilizó el primer ministro groenlandés.
La mayoría de los partidos groelandeses, incluido el de Egede, el Inuit Ataqatigiit (partido del pueblo inuit) son favorables a la independencia de Dinamarca. También la mayoría de la población. Y las declaraciones de Donald Trump fueron vistas desde la isla, a la vez, como una amenaza y como una oportunidad: amenaza por poder pasar de manos danesas a las estadounidenses y oportunidad porque el interés de EE UU se podía traducir en mejores condiciones para poder alcanzar la independencia. De hecho, el nuevo estatuto que rige la isla desde 2009 prevé el derecho de autodeterminación.
Independencia
Egede no quiso ayer especular con una posible fecha para una posible salida de Dinamarca. Hay algunos parlamentarios que la auguran para dentro de 10 años, pero la mayoría ve esa fecha muy apresurada. Para ser independiente, Groenlandia, del tamaño de cuatro veces España, habitada por 57.000 personas (la mitad de los que viven en la provincia de Soria), debería desarrollarse económicamente. Hoy por hoy son esenciales para mantener el nivel de vida de la isla (y su sistema de salud y de educación) los aproximadamente 600 millones de euros que Dinamarca versa anualmente a la isla.
El primer ministro groenlandés aseguró que Groenlandia está viendo la manera de estrechar lazos en cuestiones de defensa y de minería, pero siempre en sus propios términos. Cuando se le preguntó sobre las posibilidades de que EE UU, que ya posee una base militar en el norte de la isla, amplíe sus recursos de defensa, el primer ministro respondió: “La independencia de Groenlandia es cuestión nuestra y será Groenlandia la que decida qué hacer”.
Groenlandia, cubierta de hielo en un 80% y a la que el cambio climático está afectando a pasos agigantados, posee grandes recursos materiales: petróleo, gas, oro y minerales raros necesarios para construir baterías de coches eléctricos o turbinas de aerogeneradores. Pero aún no han sido explotados. Actualmente, la principal fuente de ingresos de la isla es la pesca, que constituye el 95% de las exportaciones.
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