Alemania anuncia controles fronterizos durante la Eurocopa de fútbol por temor a posibles atentados

El temor a un posible atentado durante la Eurocopa de fútbol que se celebrará este verano en Alemania llevó a la ministra de Interior del país europeo, Nancy Faeser, a anunciar controles temporales en todas sus fronteras mientras dure el torneo deportivo para evitar que “posibles criminales peligrosos entren en el país”.

Los estadios de la Eurocopa, que tendrá lugar entre el 14 de junio y el 14 de julio, estarán llenos de aficionados, y se espera además que decenas de miles de personas acudan a ver los partidos en lugares públicos. Estos espacios abiertos son vistos por las autoridades como “potenciales objetivos terroristas”. Para evitar cualquier incidente, las fuerzas de seguridad alemanas llevan tiempo trabajando en un plan al que se suma ahora la reintroducción de los controles fronterizos.

“Para mí, la seguridad de la Eurocopa es una prioridad absoluta”, explicó la ministra en una entrevista publicada este martes en el diario alemán Rheinische Post. En el foco de las autoridades estarán desde islamistas radicales y otros extremistas hasta los hooligans, pasando por la protección contra posibles ciberataques. Para ello, el Ministerio de Interior alemán trabaja para coordinar a las diversas fuerzas de seguridad durante el torneo y prepararlas para “todos los peligros posibles”. “Llevaremos a cabo controles fronterizos temporales en todas las fronteras alemanas durante el torneo para evitar que posibles criminales peligrosos entren en el país”, declaró Faeser. “Esto es necesario para proporcionar la mejor protección posible a este gran acontecimiento internacional”, explicó sobre una medida que ya se tomó, por ejemplo, durante el Mundial de fútbol de 2006.

Faeser visitará también las sedes de los partidos de la Eurocopa con antelación para discutir las medidas de seguridad con todos los implicados. “Se trata de las rutas de desplazamiento de las selecciones nacionales, los invitados y los aficionados, de la seguridad en los estadios y las zonas de aficionados”, explicó. Estos planes incluyen también un reciente acuerdo firmado con Francia para reforzar su cooperación para garantizar la seguridad de la Eurocopa en Alemania y de los Juegos Olímpicos que arrancan el 26 de julio en París. Entre otras cosas, se prevén unidades policiales conjuntas y patrullas en el transporte ferroviario entre Alemania y Francia.

El ataque terrorista perpetrado a las afueras de Moscú el pasado viernes, en el que perdieron la vida 139 personas, ha elevado la preocupación en torno a la seguridad en Alemania. El Estado Islámico de la Provincia de Khorasán (ISIS-K), una filial centroasiática del grupo terrorista, se atribuyó la autoría del atentado. Dado que de este grupo también muestra actividad en Alemania, las autoridades advierten de posibles atentados. “El peligro del terrorismo islamista sigue siendo grave”, dijo Faeser al diario alemán Süddeutsche Zeitung el pasado fin de semana.

“El ISIS-K representa actualmente la mayor amenaza islamista también en Alemania”, afirmó la política socialdemócrata a raíz de la detención este mismo mes de dos presuntos terroristas en Gera acusados de planear un atentado contra el Parlamento sueco.

Solo en los últimos 12 meses se han descubierto varias células vinculadas al ISIS-K en Alemania. En julio de 2023, se detuvo a siete sospechosos en Renania del Norte-Westfalia que, al parecer, tenían vínculos con células en Francia y Dinamarca. En noviembre del año pasado, fueron arrestados en el mismo Estado federado dos jóvenes acusados de planear un atentado en un mercado navideño con el objetivo de unirse al ISIS-K en Afganistán. Un mes después, también fueron detenidos miembros del ISIS-K que supuestamente habían planeado atentados contra la catedral de Colonia y la catedral de Viena, entre otras. A estos casos se suma la mencionada detención el 19 de marzo de dos supuestos miembros del ISIS-K por planear atentados en Suecia.

Según el Ministerio de Interior, el nivel de amenaza es “alto”, sobre todo, desde el ataque de Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre, y la valoración no ha cambiado como consecuencia del atentado de Moscú. La Oficina Federal de la Policía Criminal elabora periódicamente y, caso por caso, evaluaciones de riesgo sobre la situación de amenaza terrorista. “Hace tiempo que en Alemania se aplican medidas de seguridad reforzadas para los grandes acontecimientos, en particular para protegerse de las amenazas islamistas. Las autoridades de seguridad están muy atentas porque la amenaza islamista no es nueva”, según el portavoz de Interior, Cornelius Funke. No obstante, el atentado de Moscú ha llevado a las autoridades a analizar de nuevo el plan de seguridad.

Según el director del Proyecto de Lucha contra el Extremismo y experto en terrorismo, Hans-Jakob Schindler, el nivel de amenaza ha aumentado en los últimos meses debido principalmente a la guerra en Gaza. “Hamás llama constantemente a sus seguidores a cometer atentados, también en Alemania”, ha declarado este experto en la televisión pública ZDF. “Como parte de Europa y del mundo occidental, siempre hemos estado en el espectro de objetivos”, constató. “Luchamos contra Al Qaeda en Afganistán. Formamos parte de la coalición contra el ISIS. Apoyamos justificadamente a Israel en la lucha contra Hamás”.

De la misma manera lo ve el experto en terrorismo Peter Neumann, que habló en Deutschlandfunk de “una enorme movilización de islamistas, de yihadistas en toda Europa Occidental” desde el 7 de octubre. En su opinión, el ISIS-K está ahora más organizado. “Se trata de un grupo profesional que vuelve a estar en condiciones de organizar redes. Esto hace que el peligro sea aún mayor. No se trata de autores individuales. Nos enfrentamos de nuevo a redes, como hace diez años, cuando esta ola de terrorismo golpeó Europa con atentados en París, Bruselas, Berlín, Estocolmo y Londres”, añadió.

La Oficina Federal para la Protección de la Constitución (los servicios secretos internos) contabilizó un total de 27.480 personas con potencial de radicalización islamista en su informe para 2022, unos 11.000 de ellos de inspiración salafista. El principal desafío sigue siendo la coordinación entre las diferentes oficinas de los servicios secretos en los 16 Estados federados de Alemania.

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