El tóxico cementerio de barcos abandonados en Brasil
A mediados de noviembre, un barco a la deriva impactó el puente entre Río de Janeiro y Niterói
![El País](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/https%3A%2F%2Fs3.amazonaws.com%2Farc-authors%2Fprisa%2F0b9a52b8-006a-4382-938a-05e3d58f07cf.png?auth=d7a4bd5f610bf92a4f1d3b8bd39266a940bc685b735267a60e73646c6f66a05c&width=100&height=100&smart=true)
A mediados de noviembre, un barco a la deriva impactó el puente de 13 kilómetros entre las ciudades brasileñas de Río de Janeiro y Niterói. El impacto obligó a detener el tráfico entre ambas urbes por horas y encendió las alertas sobre un problema que lleva años latente: el cementerio donde más de 300 barcos abandonados flotan, provocando daños ambientales y riesgos de navegación.
La Bahía de Guanabara, uno de los puntos icónicos del turismo que llega a Río de Janeiro, alberga cientos de embarcaciones sin dueño aparente, que se deterioran lentamente filtrando sustancias tóxicas al agua. El barco que chocó, por ejemplo, contenía 50.000 litros de combustible y estaba encallado desde hace seis años.
Las autoridades brasileñas no tienen planes de remover los navíos y en su mayoría, no hay posibilidades de dar con los dueños, ya que muchas embarcaciones pertenecen a compañías ya extintas. Ambientalistas de organizaciones como Bahía Viva advierten que las sustancias contenidas en los barcos amenazan a especies como delfines, caballitos y tortugas marinas.
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