Los tiradores de Sacramento modificaron un arma para provocar más daño

Dos hermanos se han convertido en los principales sospechosos del tiroteo que dejó seis muertos la madrugada del domingo en el centro de Sacramento, la capital de California. Smiley Allen Martin, de 27 años, ha sido detenido este martes por las autoridades horas después de que su hermano menor, Dandre, fuera arrestado por posesión ilegal de un arma y agresión. Smiley fue uno de los 12 heridos que dejó el altercado. Los responsables de la investigación creen que los Martin modificaron una pistola para convertirla en un rifle automático y así aumentar la potencia de disparos. Un tercer sujeto también ha sido capturado esta tarde, pero no está directamente involucrado con el incidente, según ha informado el Departamento de Policía.

Smiley Martin fue detenido en un hospital. Tiene una larga carrera criminal desde 2013, cuando intentó huir y deshacerse de un arma que portaba cuando la policía pidió revisarlo. En menos de una década, sumó varios delitos a su historial, entre estos varios robos y un cruento episodio de violencia machista, de acuerdo a The Sacramento Bee. De manera sorpresiva, y a pesar de los esfuerzos de la fiscalía local, obtuvo la libertad condicional en febrero pasado, mientras cumplía una condena de diez años decretada por la Suprema Corte local en 2018.

La policía ha confirmado ese martes que Smiley subió la noche del sábado un vídeo a Facebook Live en el que aparece con un arma. Tras la matanza, fotografías de Smiley usando un pañuelo azul, el símbolo de la pandilla de los Crips, se han viralizado. Las fuerzas del orden no han especificado si el arma que aparece en las imágenes es la misma que fue recuperada en la escena del crimen el domingo. El tiroteo, que dejó más de 100 casquillos, ocurrió en una zona muy concurrida de bares y donde se ubica la arena Golden 1 Center, el estadio de los Sacramento King de la NBA.

Al igual que su hermano, Smiley Martin enfrenta cargos por posesión ilegal de un arma. La jefa de policía de Sacramento, Kathy Lester, dijo el lunes que “múltiples” tiradores participaron en el suceso iniciado poco después de las dos de la mañana, cuando los bares de la zona comenzaban a cerrar. Las autoridades no han detallado qué papel tuvieron los detenidos en la tragedia. El tercer sujeto arrestado es un hombre de 31 años, Daviyonne Dawson. La policía afirma que este “fue visto cargando un arma en las inmediaciones momentos después del tiroteo”, pero descarta vincularlo a la muerte de las seis personas, tres hombres y tres mujeres.

Las autoridades del sistema penitenciario local deben responder por qué liberaron al principal sospechoso de uno de los peores tiroteos del norte de California. Una carta elaborada por la fiscal de distrito fechada el 29 de abril de 2021 argumentaba en contra de otorgar beneficios a Smiley Martin. “Su conducta es violenta y su historial criminal muy largo”, señalaba el documento. “No tiene ningún respeto por los demás, la ley ni las autoridades... Si obtiene la liberación temprana seguirá rompiendo las normas”, aseguraba el documento obtenido por The Sacramento Bee.

La carta dirigida a las autoridades penitenciarias resumía nueve años de delitos que comenzaron cuando el implicado tenía 18 años y huyó de la policía cuando intentó deshacerse del arma que llevaba que portaba. El rifle, recuperado por los agentes, tenía un mango de pistola y podía desarmarse gracias a una recámara desprendible que tenía capacidad para 25 rondas de municiones. Se cree que el arma recuperada el domingo, que había sido reportada como robada, podía convertirse en un rifle automático.

En octubre de 2007, Martin entró junto a otros ladrones a un Walmart y robó varias tabletas por un monto de 2.800 dólares. Fue el primero de varios atracos similares en tiendas departamentales. Varios testigos identificaron a Smiley a través de fotografías, por lo que obtuvo dos años de cárcel.

La súplica de la fiscal de distrito, que no fue escuchada, se detiene especialmente en el episodio de violencia machista que protagonizó Martin en 2017. El hombre entró a la fuerza en casa de su novia, quien se escondía en el clóset de su recámara. Cuando la localizó, “la golpeó repetidamente con el puño cerrado en la cara, cabeza y el cuerpo... Después la arrastró afuera de la casa jalándola hasta un coche donde la agredió con un cinturón”, detalla la fiscalía. La investigación reveló que el delincuente obligaba a su pareja a prostituirse y que por mensajes de texto y por las redes sociales le imponía las tarifas que la mujer debía cobrar y qué tipo de clientes debía aceptar. Fue por este delito que obtuvo 10 años de prisión en 2018.

Este lunes, el médico forense confirmó el nombre de las víctimas del suceso. Estas eran Johntanya Alexander, de 21 años; Yamile Martinez Andrade, también de 21; Melinda Davis, de 57; Devazia Turner, un hombre de 29 años; Joshua Hoye-Lucchesi, 32 años y Sergio Harris, de 38, quien llevaba 12 años casado y deja tres hijos, de 5, 6 y once años. Siete de los 12 heridos habían salido del hospital. Entre los lesionados estaba parte de la respuesta al último episodio de violencia que sacude a Estados Unidos.

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