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Un joven mata a su madre y a cuatro transeúntes, entre ellos una niña, en el Reino Unido

El asesino, que luego se suicidó, tenía vínculos con el movimiento radical misógino ‘incel’ pero se ha descartado la motivación terrorista

Un policía este viernes en el lugar donde se produjo el tiroteo en Plymouth. En vídeo, declaraciones del comisario del condado e imágenes de la zona de los hechos.Vídeo: DPA VÍA EUROPA PRESS / REUTERS

Un joven de 22 años, Jake Davidson, ha asesinado este viernes a cinco personas en la ciudad de Plymouth, en el suroeste de Inglaterra, entre ellos, a su madre y a una niña de tres años, víctima del tiroteo indiscriminado que emprendió. El atacante se quitó luego la vida en plena calle, sin que las fuerzas de seguridad tuviesen tiempo de intervenir. Es el primer suceso de esta naturaleza registrado en el Reino Unido desde 2010 y, aunque la policía descartó prácticamente desde el principio una motivación política, está siendo investigado como el primer incidente de violencia relacionado con el movimiento incel, una corriente radical misógina originada en Estados Unidos a la que se atribuyen episodios similares.

El comisario jefe de la policía del condado de Devon y Cornualles, Shaun Sawyer, sintetizó este viernes lo ocurrido como un caso de origen “doméstico” con trágicas ramificaciones que superaron la barrera del hogar. La clave de la investigación se centra ahora en la actividad virtual del sospechoso, con la revisión integral de los discos duros de sus dispositivos electrónicos y, sobre todo, su huella digital, ya que Davidson tenía una prolífica actividad que incluía su propio canal de YouTube.

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Aunque los vídeos y sus cuentas en las redes sociales fueron retirados poco después de que se confirmase su identidad, la difusión de algunas de sus publicaciones revelaban las opiniones misóginas y la fuerte hostilidad hacia las mujeres que definen la subcultura incel (abreviatura del término en inglés para “célibe involuntario”). En la última grabación que subió a la red, Davidson, quien se formaba como operador de grúas, decía haber sido “derrotado por la vida” y se lamentaba de no tener pareja, una queja común en la mayoría de sus publicaciones.

Jake Davidson, en un imagen tomada de un vídeo que publicó en Youtube.
Jake Davidson, en un imagen tomada de un vídeo que publicó en Youtube. Europa Press

Su relación más compleja parecía ser con su madre, Maxine, de 51 años, a juzgar por los reiterados comentarios que el sospechoso había dejado en internet, marcados por el odio y una profunda desconfianza, como evidencia una de sus últimas publicaciones, en la que se refiere a su progenitora como “vil, disfuncional y caótica”, mientras en otra menciona una disputa por una suma de dinero que, decía, le debía su madre, debido al autismo que, en su opinión, padecía. Vecinos de la familia contaron a medios locales cómo madre e hijo, que solían estar muy unidos en el pasado, se habían peleado recientemente y discutían con asiduidad por los posicionamientos misóginos del joven, quien también se había aficionado a las armas de fuego, hasta el punto de “saber todo lo que hay que saber” de ellas.

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Los hechos se sucedieron en apenas 10 minutos. Varios testigos habían contado ya a la policía cómo Davidson abrió fuego por primera vez en una vivienda, que resultaría ser la de su madre. A partir de ahí, se dirigió inmediatamente a una calle adyacente, donde disparó hasta la muerte a una niña de tres años y a un hombre de 43, que se cree que era su padre, para, a continuación, abrir fuego contra un hombre de 33 años y una mujer de 53, ambos actualmente en el hospital, aunque su vida no corre ya peligro.

Peor suerte corrieron un hombre de 59 años asesinado en un parque, y una mujer de 66 que acababa de salir de la peluquería. Cuatro de las víctimas murieron en la escena del crimen, mientras la quinta lo haría poco después en el hospital.

La policía tardó seis minutos en llegar al lugar de los hechos, tras recibir numerosas llamadas después de que se oyeran los disparos contra la madre. Una vez allí, los agentes se encontraron una escena caótica, con transeúntes conmocionados y una crisis abierta ante la que tenían que determinar cuanto antes si el sospechoso había actuado solo y, sobre todo, asegurarse de que no era un atentado terrorista todavía en curso.

Los investigadores han confirmado que Davidson tenía licencia de armas, pero han rechazado aclarar si incluía la que empleó para la matanza, descrita como una “escopeta”. Lo que sí dedujeron pronto es que no hubo más implicados, por lo que el abundante material en internet es ahora una de las claves de las pesquisas, centradas en analizar la cuantiosa actividad en foros incel y de aficionados a las armas de fuego. La policía no ha detectado vínculos con la extrema derecha, pero está en contacto con la unidad antiterrorista de Scotland Yard.

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