López Obrador anuncia un plan de desarrollo en la tierra de los LeBarón

El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, se ha desplazado este domingo hasta Bavispe, en las montañas de Sonora, para entrevistarse de nuevo con la familia Langford-LeBarón, que perdió a tres mujeres y seis niños en un tiroteo el pasado 4 de noviembre cuando viajaban en dos furgonetas camino de su rancho de La Mora. La fiscalía general informó recientemente de que hay siete detenidos por este caso. “Se está avanzando, habrá justicia”, ha dicho el mandatario esta mañana y ha agradecido a varias secretarías su ayuda para “llegar a la verdad y castigar a los responsables”. López Obrador recibió aplausos cuando anunció que va a poner en marcha un plan de desarrollo para la zona y que regresará “a más tardar en seis meses” a esta tierra.

Es la primera vez que el presidente viaja a esta zona para hablar con los afectados, aunque se ha reunido con ellos en otras ocasiones. Bajo el sol invernal de Sonora, con un abrigo negro y las montañas de fondo, se ha dirigido a los congregados, que lucían chamarras de mezclilla y sombrero vaquero: “Lo primero será la justicia” para que este caso se convierta en un ejemplo de que “quien comete un delito es castigado”. Pero también ha anunciado que se levantará un monumento en el lugar donde el tiroteo acabó con la vida de las nueve personas. “También habrá un reconocimiento especial para los que acudieron en los primeros momentos al rescate de las víctimas, tanto familiares como, por ejemplo, el doctor de Bavispe. Hay que exaltar la verdadera solidaridad”. Respecto al plan de desarrollo, por cuya mención recibió algunos aplausos, se ha referido a los caminos en mal estado para llegar hasta allí, pero no ha dado más detalles.

Julián LeBarón, portavoz de la familia masacrada dijo recientemente en una entrevista con este periódico que siguen sin creer que el tiroteo y el fuego que arrasó los vehículos en el atentado fuera por error, que las víctimas fueran equivocadas. Admite que saben ya muchas cosas de lo que ocurrió aquel día, aunque no acaban de entender los motivos. Aseguró, en todo caso, que responsabilizar a López Obrador y al fiscal de la violencia en México sería simplemente “buscar un chivo expiatorio". Ayer lo repitió y lamentó que haya pandillas armadas que se paseen  por la zona.

Por su parte, Margaret Langford agradeció al presidente su visita y condenó la violencia y el crimen organizado. " Amo este país y me duele en el alma no poder vivir aquí. Esta masacre nos ha dejado perdidos y destrozados. Espero que no sea lo que defina el destino de nuestra comunidad".

El presidente se reunirá con la familia dentro de otros dos meses para seguir informándoles. La familia siempre se quejó de la tardanza de los equipos de rescate y apoyo para llegar al lugar de la tragedia. Varios de los niños que sobrevivieron pasaron horas escondidos y un bebé permaneció solo en el coche con su madre muerta a unos metros.

López Obrador ha repetido esta mañana ante los sonorenses que confía en su nueva política, que consiste en centrarse en el origen de la violencia para actuar en ese nivel. Cree que de esta forma se conseguirá serenar al país. “El ser humano, el mexicano, el sonorense no es malo por naturaleza. Son las circunstancias las que llevan a algunos a tomar el camino equivocado. Hay que fortalecer la familia, que es la institución de seguridad social más importante del país y los valores culturales, morales y espirituales”.

El apoyo a los jóvenes, las becas de estudio, el combate a la pobreza, el empleo y los salarios dignos son los elementos para que “no se enganchen a la delincuencia”. “Si les damos la espalda, las bandas tendrán en ellos un ejército” a su servicio, dijo el presidente. “Hay que abrazar a los jóvenes”, ha añadido. Y se ha referido a sus encuentros con los padres de los normalistas desaparecidos en Ayotzinapa, así como con los de los de los bebés que perdieron la vida en el incendio de la Guardería ABC en 2009, en Hermosillo. Sobre el caso LeBarón ha dicho que tienen información pero que no pueden hacerla pública por la seguridad de las investigaciones.

López Obrador llegó a Bavispe después de tres horas en un vehículo. “Saben que yo no viajo en avión. Si no voy por carretera cómo voy a saber cómo están los caminos”, ha dicho y de nuevo ha recibido aplausos. Los secretarios de Seguridad (Alfonso Durazo), de Defensa Nacional (Luis Cresencio Sandoval) y de Marina (Rafael Ojeda) lo han acompañado en esta visita para reconocer y honrar a las víctimas de la tragedia en el rancho de La Mora.