_
_
_
_

Los manifestantes vuelven a las calles de Hong Kong

La marcha bajo el lema “no olvidar por qué comenzamos" las protestas transcurrió con escasos incidentes

El impacto de un cóctel molotov, el 1 de diciembre en Hong Kong. En vídeo, imágenes de las protestas de este domingo.
Macarena Vidal Liy

Decenas de miles de personas, la mayoría jóvenes y la mayoría vestidas de negro, participaron de nuevo este domingo en una nueva marcha de protesta en Hong Kong tras la pausa electoral de la última semana. El lema de la convocatoria en Tsim Sha Tsui, frente a la bahía, era “no olvidar por qué comenzamos” las protestas que han sacado a miles de manifestantes a las calles a lo largo de los últimos seis meses. Con ella, los participantes querían enviar al Gobierno autónomo y a la policía hongkonesa el mensaje de que el movimiento va a continuar con sus movilizaciones, pese a su triunfo en los comicios.

Más información
La policía de Hong Kong entra en el campus de la Universidad Politécnica
Trump ratifica la ley en apoyo a los manifestantes de Hong Kong criticada por China
Hong Kong ha hablado

Los manifestantes –16.000 según la Policía, 380.000 según los organizadores– querían aprovechar el impulso obtenido después de la victoria aplastante de la oposición en las municipales de hace una semana, en las que logró el 86% de los asientos de concejal en juego, para mantener la presión sobre el Gobierno autónomo que encabeza Carrie Lam.

Pese a la avalancha electoral, Lam ha descartado hacer más concesiones a las demandas de los manifestantes: dejar en libertad sin cargos a los cerca de 6.000 detenidos en las protestas, apertura de una investigación independiente sobre el comportamiento de la policía y sufragio universal para designar al jefe del ejecutivo local. Hasta el momento los participantes en las protestas solo han logrado la cancelación del polémico proyecto de ley de extradición que desató las movilizaciones.

A lo largo de la marcha, los participantes coreaban lemas como “¡luchad por la libertad, defended a Hong Kong!” o “¡hongkoneses, resistid!”. A lo largo de la ruta esos mismos lemas se repetían en pintadas.

La ruta pasaba por las cercanías de la Universidad Politécnica, donde el viernes la policía finalmente había levantado su cerco de trece días y puesto fin al peor episodio de violencia de las protestas. Según los organizadores, la selección de ese trayecto había sido una decisión muy consciente, precisamente para incidir en el lema de "no olvidar".

“Claro que las protestas van a continuar. Tenemos que seguir en la calle, es la única manera de conseguir cosas. Ganar las elecciones municipales está muy bien, por supuesto que sí, pero no supone ningún avance real, los concejales no tienen ningún poder para tomar decisiones legislativas”, comentaba antes del inicio de la concentración James, un estudiante de 22 años vestido de negro de los pies a la cabeza.

La marcha, que había recibido autorización oficial y estaba fuertemente vigilada por la policía en uniforme antidisturbios, se desarrolló con escasos incidentes. En Tsim Sha Tsui los agentes lanzaron varias rondas de gas lacrimógeno después de que, según indicó la cuenta de Twitter del cuerpo hongkonés, varios manifestantes les tiraran ladrillos. En Hung Hom, donde terminaba la marcha, reinaba una tensa calma. Finalmente, los participantes se disolvieron pacíficamente poco antes de la hora prevista, las 18.00 (11.00 hora peninsular española).

Previamente, otra marcha había llegado hasta el Consulado estadounidense para dar las gracias a ese país por la aprobación de la Ley de Derechos Humanos para Hong Kong, que obliga a Washington a comprobar anualmente el respeto a las libertades fundamentales en la antigua colonia británica. Si encuentra que no es suficiente, puede imponer una serie de sanciones a los responsables y retirar al territorio autónomo el estatus comercial preferente del que disfruta y que le permite evadir las restricciones que EE UU impone a China.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Macarena Vidal Liy
Es corresponsal de EL PAÍS en Washington. Previamente, trabajó en la corresponsalía del periódico en Asia, en la delegación de EFE en Pekín, cubriendo la Casa Blanca y en el Reino Unido. Siguió como enviada especial conflictos en Bosnia-Herzegovina y Oriente Medio. Licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_