_
_
_
_

Los presupuestos desatan una feroz batalla en el Gobierno italiano

La Liga y el Movimiento 5 Estrellas ganan la batalla al ministro de Economía y consiguen elevar el déficit al 2,4% del PIB

El Gobierno italiano ha ignorado las advertencias de Bruselas para controlar el gasto público y a su ministro de Economía, el técnico independiente Giovanni Tria. El Ejecutivo aprobó anoche elevar el déficit al 2,4% del PIB, tres veces por encima del límite que mantuvo el anterior Gobierno de Paolo Gentiloni. La cuestión presupuestaria había desatado una feroz batalla entre la Liga y el M5S, que pedían aumentar el gasto, y Tria, que no quería irritar a la Comisión Europea.

Luigi Di Maio, este jueves en Bruselas, antes de volar a Roma.
Luigi Di Maio, este jueves en Bruselas, antes de volar a Roma.Virginia Mayo (AP)

Los vicepresidentes y principales socios del Gobierno, Luigi Di Maio y Matteo Salvini, del Movimiento 5 Estrellas y la Liga respectivamente, consiguieron vencer ayer a última hora las resistencias del ministro de Economía. Y después de un pulso que duró días —y en el que Salvini se mantuvo en un discreto segundo plano— ambos celebraban la victoria. “Son los presupuestos del cambio, los presupuestos del pueblo”, aplaudían.

Fijar las líneas maestras del presupuesto para 2019 era la decisión más difícil que debía tomar el Gobierno desde que asumió sus funciones en junio. Y la fumata blanca, después de días de tensión, no llegó hasta última hora de ayer. El Consejo de Ministros optó por aumentar el gasto como proponía el Movimiento 5 Estrellas y dar carpetazo a la línea prudente de Tria, que abogaba por el 1,6%. “Hoy es un día histórico. Hoy ha cambiado Italia”, escribió el líder del M5S y ministro de Trabajo y Desarrollo Económico, Di Maio, en su cuenta de Facebook.

Más información
Un frente europeo contra la xenofobia

Sin aumentar el techo de gasto, los recursos no alcanzarán para financiar las promesas electorales de Di Maio y Salvini. El M5S necesita mayor margen fiscal para cumplir con sus promesas y abogaba por subir el déficit hasta el 2,4% del PIB. El objetivo es financiar así algunas de sus principales propuestas políticas como la renta de ciudadanía —su gran baza electoral—, que en la práctica podría parecerse a una suerte de subsidio de desempleo.

Promesas electorales

A ello se suman otros compromisos que van desde las desgravaciones fiscales defendidas por la Liga, hasta la intención de cancelar la vigente ley de pensiones.

Aunque aún están por definir —y deberán pasar por el Parlamento—, Salvini cantaba victoria al término de la reunión del Ejecutivo y hablaba de una bajada de impuestos para un millón de trabajadores y del acceso a la jubilación para 400.000 empleados, entre otras medidas aún por delinear.

En los últimos días, el nivel de fricción entre las dos partes del Ejecutivo se disparó hasta el punto de que el pasado miércoles se llegó a poner sobre la mesa la posibilidad de dimisión del ministro de Economía. El M5S sacó su artillería pesada contra Tria y los técnicos de su Ministerio para ponerlos contra las cuerdas. Luigi Di Maio subió el pulso: si los presupuestos de 2019 cortan las alas de su renta de ciudadanía, su partido no votaría la propuesta. Eso, directamente, hubiera hecho caer al Gobierno del que es el principal socio.

En medio de todo el caos, la Liga había optado por un perfil bajo apartándose de la polémica. De forma oficial, apoyó a sus socios del Movimiento 5 Estrellas, pero ninguno de sus exponentes avaló abiertamente ni los ataques contra el ministro Tria ni la petición de ampliar el déficit.

La nueva medida del Gobierno italiano no solo desafía a Bruselas sino que también encuentra oposición dentro de Italia. “El Gobierno secuestra nuestro país y juega con el futuro de nuestros hijos. Son los presupuestos de la irresponsabilidad”, declaró Mariastella Gelmini, de Forza Italia.

En cualquier caso, el acuerdo sobre el déficit podría no ser el armisticio definitivo, ya que la cifra que tenían previsto aprobar anoche no es vinculante y, aunque no hay muchas probabilidades ni precedentes, podrá sufrir modificaciones en la tramitación de la ley de presupuestos durante los próximos meses. Además, es en esa norma en la que se especificará cómo se distribuyen los recursos, y no en el documento que se discute estos días.

El fondo del asunto va más allá de un déficit fuera de control y deja entrever lagunas de base en el acuerdo de Gobierno de ambas formaciones, que evidencian que las promesas encuentran cada vez más obstáculos para llevarse a la práctica. En juego estaban la solidez y la viabilidad del pacto entre el Movimiento 5 Estrellas y la Liga. Y los mercados lo saben, tanto que la Bolsa sufrió ayer un retroceso del 2%.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Más información

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_