Descubrir Japón a través de las tapas de las alcantarillas

Shoji Marimoto recorre las ciudades de Japón con los ojos clavados en el suelo; desde hace tiempo tiene una particular afición: ir a la caza de las tapas de las alcantarillas, insólitas obras de arte. Cerca de 1.700 municipios del país del sol naciente han instalado, desde los años ochenta, modelos personalizados y coloridos de esas tapas de hierro fundido para embellecer sus espacios públicos y atraer turistas. Las artísticas cubiertas han generado desde entonces un movimiento de aficionados que fotografían las obras que descubren y las comparten en las redes sociales.

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Shoji, de 48 años, descubrió esta nueva afición durante un viaje a la ciudad de Fukui, en el centro del país. La imagen de dos aves fénix, el legendario animal que renace de sus propias cenizas, decorando una de las alcantarillas, llamó su atención. Estos seres mitológicos simbolizaban la doble resurrección de la ciudad devastada por bombardeos en 1945 durante la Segunda Guerra Mundial y por un terremoto, en 1948.

“A veces investigo para saber por qué determinada ciudad tiene determinado diseño. Estoy impresionado cuando descubro que representa su historia y su cultura”, contó el empleado comercial a AFP, y aseguró que viaja incluso lejos para descubrir nuevas obras. “Es una caza del tesoro para adultos”, añade sonriente.

El entusiasmo provocado por estos objetos ha crecido tanto que los aficionados organizan congresos a los que asisten miles de participantes. Como no se pueden coleccionar estos objeto de 40 kilos, como si fueran sellos o monedas, a la empresa GKP se le ocurrió editar 1,4 millones de tarjetas con 293 diseños distintos de tapas de alcantarilla, con las coordenadas GPS de cada una de ellas.

Los aficionados se pelean por estas obras de arte cuando se ponen a la venta. En octubre, 190 personas participaron en una lotería organizada por la ciudad de Maebashi, situada al este, para repartir 10 cubiertas del municipio, por 3.000 yenes cada una (22 euros).

Los diseños de las tapas suelen hacer referencia a la historia, a la geografía o a emblemas locales: un castillo fortificado para Osaka, un puente emblemático de la bahía de Tokio para el puerto de Yokohama o el monte Fuji para la ciudad que lleva el mismo nombre, situada en las faldas del célebre volcán.

Pero también hay cubiertas con diseños más renovados. La famosa gata Hello Kitty se convirtió en el ícono las alcantarillas de la ciudad de Tama, una ciudad de la periferia oeste de Tokio. La imagen de la gatita adorna hasta 10 de cubiertas instaladas cerca de un parque de atracciones para niños.

La labor de embellecimiento de las cloacas viene desde los años setenta y ochenta, cuando se hizo necesario el desarrollo de una moderna red de alcantarillado, ya que la polución procedente de las aguas domésticas que infestaba los ríos, y las grandes áreas urbanas habían crecido sin un sistema sanitario apropiado. Para hacer que los ciudadanos se sintieran más familiarizados con las nuevas alcantarillas, al Ministerio de Construcción nipón se le ocurrió estampar sobre las tapas el emblema local. Del símbolo de la ciudad se pasó a incluir los personajes, paisajes y otros elementos distintivos del municipio.