“La reforma educativa está blindada en 2018”
Cinco expertos discuten en un desayuno en la redacción de EL PAÍS en México el futuro de uno de los proyectos principales del Pacto por México de cara a las próximas presidenciales
México aguarda el futuro de una de sus reformas más ambiciosas. A menos de un año de las elecciones presidenciales de 2018, el país se pregunta si la modernización del sistema educativo emprendida por el Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto resistirá la tormenta política que se avecina rumbo a los comicios del 3 de junio. Este proyecto es uno de los cambios de mayor calado del sector en más de dos décadas. Busca que los maestros dejen de ser herramientas corporativas del sindicato magisterial para convertirlos en protagonistas del debate educativo y colocarlos en el centro de la transformación de las aulas. El conflicto social que generó esta reforma ha dado paso, tres años después, a un debate pedagógico. No obstante, aún existen amenazas que prometen echar abajo una de las normas con mayor respaldo entre los mexicanos. “La reforma educativa está blindada”, considera David Calderón, presidente ejecutivo de Mexicanos Primero, uno de los cinco expertos en la materia que acudieron al segundo Desayuno de Redacción del EL PAÍS en México.
Los expertos consideran que los frutos de la reforma se podrán ver en diez años
La reforma educativa nació en el seno del Pacto por México, un acuerdo entre los tres partidos mayoritarios del país, el PRI, el PAN y el PRD. Su camino inició en 2013 con algo que parece sencillo: la modificación del artículo tercero de la Constitución. Aunque suene a poco, el texto solo había sufrido modificaciones cosméticas en los años recientes. En la anterior legislatura, el tercer párrafo se reescribió para garantizar el derecho a aprender de los niños. Esto ha hecho que sea posible recurrir a los tribunales para defender esa garantía constitucional a los menores sobre cualquier interés corporativo del magisterio. Algunos políticos de la oposición, entre ellos Andrés Manuel López Obrador, del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) han amenazado con revertirla. Para conseguirlo, el líder de la izquierda tendría que hacerse del control de la mayoría del Congreso y que 22 (de 32) congresos estatales dieran marcha atrás a la reforma.
Javier Treviño, subsecretario de Educación Básica en la Secretaría de Educación Pública (SEP), explica que uno de los primeros objetivos de la reforma fue la creación del Servicio Profesional Docente, un sistema que introdujo la meritocracia en la carrera magisterial a través de la evaluación y formación de los docentes. Esto rompió con una inercia enquistada desde hace décadas. En ella, el poderoso Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), la organización sindical más grande de América Latina, marcaba la pauta en la educación.
Mejor inglés en 20 años
Lengua indígena, español e inglés. En ese orden se hará el énfasis en la enseñanza del idioma. Las comunidades indígenas trabajaron junto a las autoridades educativas en la elaboración de materiales para la enseñanza de los diferentes dialectos. Habían pasado 23 reimpresiones de los libros de texto en lenguas autóctonas sin que se revisaran. Pero México, vecino de Estados Unidos, no puede dejar a un lado la enseñanza del inglés. La Secretaría de Educación Pública está elaborando una estrategia de fortalecimiento del inglés a 20 años que será presentada mañana martes por el secretario Aurelio Nuño.
“Un paso estratégico para la enseñanza es que los alumnos de las escuelas normales egresen sabiendo el idioma”, señala el subsecretario de Educación Básica, Javier Treviño. El funcionario asegura que en cuatro años todos los maestros dejarán las normales con un nivel C2 (avanzado según los estándares europeos de la Universidad de Cambridge). “Vamos a contratar 1.000 maestros de inglés para las normales. Esto tendrá un efecto multiplicador”.
Los maestros de las normales estarán dos niveles por encima de sus alumnos. Al finalizar la educación secundaria, los estudiantes mexicanos de educación pública tendrán un nivel de inglés B2 para leer, entender y redactar mensajes rutinarios en el idioma. “Queremos que todos los maestros del sistema educativo tengan un conocimiento suficiente para poderlo enseñar. Hoy no lo tienen”.
La implementación del Servicio Profesional Docente generó un conflicto social y policiaco. Decenas de miles de profesores salieron a las calles para oponerse a la reforma. En algunos estados los movimientos fueron reprimidos por las autoridades locales. La salida del conflicto exigió negociaciones políticas. Al restar poder al sindicato, el Gobierno pudo hacer un censo de escuelas y maestros y elaborar un diagnóstico. Encontró muchos docentes que acaparaban plazas sin trabajar y halló instalaciones educativas olvidadas y en pésimas condiciones. “El objetivo es rehabilitar 33.000 escuelas con una inversión de 50.000 millones de pesos (2.700 millones de dólares). Llevamos una tercera parte”, señala Treviño, que supervisa la educación básica, un área con 26 millones de alumnos, 1.2 millones de maestros y 226.000 escuelas. El Gobierno también ha apostado por multiplicar el número de escuelas de tiempo completo. Pasaron de 6.500 al inicio de este sexenio a 25.000.
Los expertos consideran que los frutos de la reforma se podrán ver en diez años o dos ciclos de primaria. Sin embargo, algunos ejemplos ya se pueden observar. La evaluación de los profesores ha provocado un relevo generacional en los centros educativos. Treviño explica que con el sistema anterior un profesor necesitaba 27 años de servicio para convertirse en director de escuela. “La edad media de los directores era de 73 años”, agrega Calderón, presidente de una organización civil que ha abanderado los temas educativos. “En este momento tenemos 12% de escuelas con directores jóvenes que llegaron con méritos propios, por exámenes”.
La reivindicación de la figura del docente es una de las fuerzas de la reforma. “Si se empodera al maestro, el profesor motivado, creativo y con vocación debería defender la nueva estructura”, asegura Rosa María Catalá, directora del Colegio Madrid, una escuela privada del sur de la Ciudad de México fundado en 1941 por el Gobierno de la Segunda República española en el exilio.
Es extraño hablar de una reforma educativa sin debatir los contenidos de la currícula. A lo largo de 2013 y 2014 el conflicto laboral con los profesores que no querían ser evaluados eclipsó la información sobre la reforma. Esto ha cambiado. A inicios de este mes el 98% de los maestros convocados asistieron a su examen. “Existe la percepción de que esa primera fase de evaluación se prolongó, la conversación pedagógica no llegaba”, considera Antonio Moreno, director general de contenidos de Grupo Santillana en México. También esto ha generado un desgaste. “Todo el mundo estuvo concentrado en el problema de que los maestros dejaran la calle y no estamos listos para las propuestas positivas”, afirma Calderón.
Pero el debate ha llegado finalmente. La SEP presentó hace algunos días los nuevos planes de estudio elaborados por un centenar de expertos y basados en más de 300.000 sugerencias recogidas en una serie de foros abiertos convocados por la autoridad educativa. “Queremos pasar de la gran extensión en las asignaturas a una mayor profundidad. Pasar de la memorización a que los niños investiguen, pregunten, formulen hipótesis y proyectos de investigación”, explica el subsecretario Treviño.
En México hay 26 millones de alumnos, 1.2 millones de maestros y 226.000 escuelas en educación básica
“Este cambio educativo obedece a esta sociedad más democrática, más abierta y más crítica que quiere dejar de lado las catequesis y los evangelios de cualquier naturaleza”, considera Carlos Mancera, presidente del Consejo Nacional de Participación Social, quien asegura que esta reforma es la “más profunda en muchas décadas”. “El 80% de los programas y planes nuevos está dedicado a la pedagogía cuando antes esto se dedicaba a los contenidos prescriptivos”.
El nuevo diseño curricular tiene tres pilares fundamentales: lenguaje y comunicación, pensamiento matemático y exploración de las ciencias naturales y sociales. Asimismo, los nuevos planes de estudio integran nuevas áreas: el desarrollo personal y social de los niños. Esto incluye educación emocional, física y en el arte.
Una de las claves de los nuevos planes es la flexibilidad. El 20% de la enseñanza podrá ser definido por cada escuela. “Es el sueño de todo pedagogo: Cuatro días de currícula nacional y un día ellos pueden elegir qué aprender”, dice Calderón. Esta autonomía permite, con ciertos lineamientos, profundizar en los campos de formación académica, educación financiera o ambiental, temas regionales y locales, robótica y proyectos de organización comunitaria, entre otros.
Esa libertad pretende reducir la brecha entre las escuelas públicas y privadas. Catalá, del Colegio Madrid, reconoce que la educación privada tiene un “largo recorrido” modelando su propio camino. La clave, tanto en el sector público como privado, está en formar a los maestros y prepararlos para un cambio de esta envergadura. Esto incluye un cambio cultural en la sociedad para abrazar el pensamiento crítico. “Existen familias que no tienen un capital cultural para comprender lo que es una clase abierta en la que el niño participará argumentando y preguntando y no memorizando. Algunos padres de familia sienten que en una clase así el maestro no está enseñando”, agrega la maestra de química.
El cambio de los planes de estudio llegará en agosto de 2018 para el nivel preescolar, los primeros dos grados de educación básica y el primero de secundaria. La educación emocional y de convivencia llegará a todos los niveles en el mismo periodo. La entrada en vigor de todo el sistema básico será en agosto de 2019.
“Se está dando casi todo un ciclo escolar para la formación de docentes. Es un abismo de diferencia si se compara con las dos semanas que se daban antes”, dice Moreno. Catalá pide también evaluar los procesos para asegurarse de que la implementación de la reforma está teniendo los frutos deseados. El Gobierno se está preparando también para esta nueva etapa. En sus planes está enviar a 1.000 maestros de inglés nivel C2 (avanzado) a las normales mexicanas para que preparen a los futuros profesores. En las aulas, las clases de lengua se enfocan en español, inglés y lenguas indígenas.
El futuro también representa retos para la reforma en medio de un ambiente político crispado. “La reforma puede morir de inanición”, considera Calderón. Ese riesgo está latente y puede suceder sin necesidad de que haya un cambio del partido en el poder. Esto significaría que la Administración dejara de inyectar los recursos necesarios al sistema educativo para su transformación y abandonara también el acompañamiento a los Gobiernos estatales para vigilar la implementación de la reforma. Corresponderá a la sociedad civil y a los padres de familia vigilar que este esfuerzo de transformación de uno de los sectores más urgentes para México no muera de inacción.
Javier Treviño: “Los maestros han entendido que el mérito es lo único importante”
El nuevo Servicio Profesional Docente ha colocado nuevamente a los maestros al centro de la escuela. Treviño dice que le basta hablar 15 minutos con un director para saber si su escuela funciona o no. “El liderazgo de los directores es fundamental y ahora hay un cambio generacional”, dice el subsecretario. La evaluación y formación de los profesores ha permitido inyectar vigor a los centros educativos. Es la segunda vez que esto sucede. La primera ocasión fue en 1921, cuando el político e intelectual José Vasconcelos fundó la Secretaría de Educación Pública.
Carlos Mancera: “Esta es la reforma más profunda en los últimos 23 años”
Este economista por el Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM) ha estado siempre cercano a los temas educativos. Ha visto diversos cambios en el sector. Primero como empleado de la SEP de 1994 a 2001 y después como consultor especializado en planeación y evaluación. En esta reforma del Gobierno del PRI percibe, sin embargo, un mayor calado y más ambición. “Esto no garantiza que sea exitosa en poco tiempo. Pero sí significa que sobre un trabajo metódico sobre estas bases se pude producir un cambio necesario en lo que aprenden los niños”.
Rosa María Catalá: “Hay que apostar a que los alumnos quieran ser profesores”
Rosa María Catalá lleva casi 30 años dando clases. Inició como maestra de Química en la institución que hoy dirige, el Colegio Madrid. Esta escuela fue fundada por republicanos españoles hace más de 70 años. La profesora, que ha publicado más de 15 libros de texto sobre ciencias, cree que la reforma educativa puede dar una nueva reputación a los maestros. Hace mucho que los mexicanos de clase media han dejado de aspirar a ser educadores. “El maestro en México está muy golpeado”. Una carrera basada en méritos y no en designaciones corporativas puede ser un nuevo punto de partida para reivindicar esta figura.
Antonio Moreno: “La conversación pedagógica tardó en llegar”
La depuración del magisterio ocupó la mayor parte de la agenda noticiosa que provocó la reforma educativa. Las protestas callejeras de los maestros desplazaron el gran debate sobre los contenidos de la educación para el Siglo XXI. México decidía cómo enseñar a su niños a aprender. Existió poca cobertura a los 15 foros nacionales y 200 locales que se organizaron para recoger las propuestas para el nuevo modelo educativo. Hoy casi un centenar de expertos preparan la elaboración de los nuevos libros de texto. “Hay que asegurar la continuidad y la vigencia para ver los resultados y la evolución”.
David Calderón: “El Poder Judicial debe estar familiarizado con la reforma educativa”
Mexicanos Primero ha sido una organización muy combativa. Si algunos maestros han tomado las calles para oponerse a ser evaluados, esta asociación civil ha recurrido a los tribunales para que los niños no se queden sin clases y las escuelas sin recursos. Los vaivenes políticos todavía hacen muy frágil a la reforma educativa. Por eso Calderón pide que los Gobiernos de los Estados y los partidos políticos se sumen a este esfuerzo que hoy es dado casi en solitario por la Administración federal. El futuro de la implementación de la reforma podría depender de los jueces. Es por esto que es necesario que los togados conozcan el nuevo modelo educativo y las partes de la norma.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.