Donald Trump presta declaración jurada ante los abogados del chef español José Andrés

Se trata de que las defensas escuchen un testimonio grabado de los dos implicados, algo que los abogados podrán utilizar cuando se celebre el juicio, más adelante. José Andrés también declarará este mes. La empresa del chef no ofreció ningún comentario al ser contactada por este diario.

De no alcanzarse una solución extrajudicial, el proceso tendrá lugar cuando Trump ya sea presidente del país, una situación poco común en la historia del país. El último mandatario que tuvo que participar en un proceso similar fue Bill Clinton, en 1998. En esa ocasión, Clinton tuvo que declarar tras ser acusado de acoso sexual por una funcionaria de Arkansas, Paula Jones.

Desde que ganó las elecciones, Trump y su equipo de transición han tratado de solucionar algunos de los conflictos legales en los que está involucrado el presidente electo para evitar que estos le causen problemas durante su etapa en la Casa Blanca.

Hace apenas diez días, el magnate anunció el cierre de su polémica fundación, que está siendo investigada por utilizar fondos filantrópicos para saldar deudas personales. En noviembre, Trump acordó pagar 25 millones de dólares para cerrar el caso de la Universidad Trump, una institución educativa superior que operó la empresa del republicano y que ha sido acusada de negligencia. El equipo de Trump anunció esta decisión a pocos días de comenzar la fase de juicio.

Hasta el momento, el equipo del presidente electo no ha mencionado ninguna intención de llegar a un acuerdo con José Andres, algo que sí le ha pedido este. En diversas ocasiones, la última de ellas este mismo jueves, el chef ha propuesto a Trump que lleguen a un acuerdo económico y donen el dinero a alguna organización benéfica.

La confrontación comenzó en 2015, cuando el cocinero canceló su plan de abrir un restaurante en el hotel de lujo que Trump inauguró el año pasado en Washington. El español anunció esta decisión en protesta por los comentarios ofensivos contra los inmigrantes mexicanos que el republicano hizo desde el principio de su campaña.

Trump respondió con una demanda de 10 millones de dólares contra José Andrés en agosto de 2015 por romper el contrato. En octubre de ese año, José Andrés presentó a su vez una querella contra el magnate por ocho millones de dólares, alegando que sus comentarios incendiarios contra la comunidad latina le dificultaron el proceso para conseguir patrocinadores y personal, ya que su restaurante iba a ser de temática hispana.