Colombia cierra 2016 con la cifra más baja de homicidios en 42 años
Con 12.000 casos, según el Ministerio de Defensa, se mantiene la caída de este indicador de violencia por cuarto año consecutivo
El ministro de defensa de Colombia, Luis Carlos Villegas, dice con orgullo que los índices de violencia bajaron en el 2016. “Este es un país que definitivamente avanza hacia la conversión en una sociedad mucho más civilizada y tranquila”, aseguró al revelar la cifra de homicidios de este año, que ronda los 12.000 casos. Casi 24,4 por 100.000 habitantes. La más baja en los últimos 42 años.
La tendencia hacia la caída de este indicador de violencia ha sido constante desde hace cuatro años. En el 2015, hubo 1.150 casos menos que en el 2014 y la tasa fue de 25 homicidios por cada 100.000 habitantes. Muy lejos de lo que Colombia vivió en el 2005, uno de los más violentos de los últimos tiempos, cuando se registraron 18.111 homicidios. Por eso, este año se recordará como uno de los más pacíficos en Colombia. El acuerdo de paz con las FARC, que se cerró y generó el cese de hostilidades significó que se redujeran los heridos en combate. Mientras en el 2015 hubo 131, este finaliza con 31.
El panorama de los secuestros también es otro. Desde el 2000, se han reducido en un 92%. Hace 16 años se presentaron más de 3.000. Durante el 2016, llegó a 188. “Es una cifra histórica frente a la disminución de este delito atroz”, dijo esta semana el director de la Policía antisecuestros, el general Fernando Murillo. En el 88% de los secuestros registrados, la delincuencia común fue responsable, en el 11% fue la guerrilla del ELN y en el 1% estuvieron las bandas criminales detrás de los plagios. No hubo ninguno por parte de las FARC y la mitad de los que se registraron tuvo fines de extorsión. La mayoría de las víctimas fueron liberadas, 57 rescatadas por las autoridades y siete permanecen en cautiverio.
El silencio de los fusiles, como consecuencia del proceso de paz, se evidencia en las cifras y se siente en lugares como el Hospital Militar, en Bogotá, en donde a final de año era normal que ingresaran cientos de uniformados heridos. Este diciembre solo había uno. “Este año hemos recibió 31 heridos en combate, si comparamos estas cifras con los últimos cinco años hay una disminución realmente importante. Por ejemplo, en el 2011 hablábamos de una cifra de 424 heridos. Eso sí demuestra cómo se ha modificado el trauma de la guerra”, explicaba hace unos días Clara Galvis, subdirectora médica del hospital.
Para el ministro de defensa, aunque el reto es disminuir aún más los índices de violencia en un país que estuvo en guerra por más de cinco décadas, el 2016 fue un comienzo positivo. “Tenemos que bajar la cifra de homicidios en los próximos cinco años por debajo de 10.000, pero este un buen principio”, ha dicho.
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