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Obama pide perdón a la presidenta de Médicos Sin Fronteras

La organización pide en Ginebra una investigación internacional del ataque de Kunduz que dejó 22 muertos civiles

El presidente de EEUU, Barack Obama, durante una rueda de prensaFoto: reuters_live | Vídeo: AP

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha llamado por teléfono a la presidenta de Médicos Sin Fronteras, Joanne Liu, para “disculparse” personalmente por el ataque de las fuerzas norteamericanas contra el hospital de la organización en la ciudad afgana de Kunduz que dejó 22 civiles muertos.

Obama “se disculpó y ofreció sus condolencias por el personal de MSF y los pacientes que murieron y resultaron heridos cuando un ataque militar estadounidense alcanzó un hospital de la organización”, dijo el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest.

El mandatario aseguró a Liu que la investigación oficial estadounidense proporcionará un relato “transparente, exhaustivo y objetivo de los hechos y circunstancias del incidente”, agregó el portavoz de Obama, según el cual el presidente también habló con el mandatario afgano, Ashraf Ghani.

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En el mismo día de la llamada de Obama, Liu reclamaba desde Ginebra una comisión internacional independiente que investigue el bombardeo. “Esto no ha sido sólo un ataque a nuestro hospital, ha sido un ataque a las Convenciones de Ginebra que no se puede tolerar”, dijo.

La creación de la comisión, un mecanismo previsto en las Convenciones de Ginebra, requiere que al menos uno de los 76 países firmantes apoye la petición para que el organismo se constituya y empiece a investigar.“Los hechos y las circunstancias de este ataque deben ser investigados independiente e imparcialmente, sobre todo después de las inconsistencias de las explicaciones dadas por EE UU y Afganistán sobre lo que ha ocurrido”, apuntó Liu, que mostró su desconfianza en una “investigación militar de EE UU, la OTAN o las fuerzas afgana.

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Liu defendió que “las Convenciones de Ginebra son “la diferencia entre la vida y la muerte para los equipos médicos que están en primera línea de batalla”. “Es lo que permite que los pacientes tengan acceso a nuestras instalaciones sanitarias de manera segura y lo que nos permite proporcionar atención médica sin ser objetivo de guerra”, continuó Liu.

Según la presidenta de MSF, si el bombardeo en Kunduz —el peor ataque aéreo que ha sufrido la ONG fundada hace 42 años— queda impune, los países en conflicto tendrán “un cheque en blanco para hacer lo que quieran porque no serán responsables de nada”.

El máximo responsable militar de EE UU en Afganistán, el comandante John Campbell, asumió el martes la responsabilidad por el “error” del bombardeo, si bien justificó que el ataque se había realizado a petición de las fuerzas afganas. Pero estas explicaciones no han sido suficientes para Liu: “El pasado sábado, pacientes de MSF y personal de la ONG se sumaron al incalculable número de personas muertas en el mundo en zonas de conflicto a las que se hace referencia como daños colaterales. Pero el Derecho Internacional Humanitario no trata de errores sino de intenciones, hechos y porqués”, ha finalizado Liu.

 

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