41 imputados en Bangladés por un derrumbe que causó 1.100 muertos

La policía de Bangladés ha presentado cargos de asesinato contra 41 personas por el derrumbe en 2013 del edificio Rana Plaza, un inmueble que albergaba talleres textiles, que causó más de 1.100 muertos. Entre los imputados se encuentra el dueño del edificio, Sohel Rana, de 35 años. Un juzgado de Dacca, capital bangladesí, ha aceptado los cargos en relación al mayor desastre industrial en la historia del país.

"Hemos imputado a 41 personas, incluyendo al dueño del edificio, Sohel Rana, por asesinato por el derrumbe del Rana Plaza en abril de 2013", afirmó el jefe de la investigación, Bijoy Krishna Kar, a la agencia France Presse. Si son acusados, todos se enfrentan a la pena de muerte, ha añadido. Entre los imputados se encuentran siete propietarios de fábricas ubicadas en el complejo y 12 funcionarios del Gobierno responsables de seguridad e inspecciones.

Los padres de Sohel Rana, también propietarios del edificio, y el alcalde y uno de los concejales de Savar, la localidad en la que estaba situado el inmueble, también están imputados por asesinato. La policía ha solicitado al juzgado que emita orden de arresto para 25 personas, incluyendo seis funcionarios del Gobierno, después de que se hayan fugado.

"Es el mayor desastre de la industria en la historia de Bangladés. Y los 41 tienen responsabilidad colectiva por este asesinato masivo de más de 1.100 inocentes", ha indicado Kar.

Rana se convirtió en el enemigo público número uno después de que los supervivientes contaran cómo miles de ellos fueron forzados a entrar al complejo al comienzo de su jornada laboral a pesar de sus quejas acerca de la aparición de grietas en las paredes. Fue arrestado en la frontera oeste con India cuando intentaba huir del país en los días posteriores al desastre.

Raya y otras 17 personas también han sido imputadas por violar el código de construcción por haber ampliado hasta los nueve pisos una estructura que había recibido permiso para seis —incialmente el edificio fue aprobado como un centro comercial—. "Rana Plaza fue construido burlando las normas de construcción y se amplió sin aplicar los cambios estructurales adecuados. Y cuando se convirtió en un complejo que albergó fábricas textiles, fue equipado con maquinaria pesada, como un generador. No es extraño que el edificio se derrumbara", ha señalado Kar.

"Esa ampliación ilegal que viola las reglas de la construcción fue la semilla de este desastre masivo", dijo Kar el domingo.

La policía anunció el año pasado que imputarían a Rana por asesinato, pero el proceso se ha demorado porque era necesario el permiso del Gobierno para presentar cargos contra la docena de funcionarios incluidos entre los 41 procesados, un requisito en Bangladés.