“Hay esquizofrenia con las reformas”

Bruno Cautrès, investigador de la centenaria universidad Sciences Po, sostiene que la realidad va por delante de los políticos.

Pregunta. Las reformas son contestadas incluso en el seno de los socialistas.

Respuesta. Típico de Francia. A la vez que en la vida pública hay oposición a las iniciativas políticas reformistas, la vida económica y social evoluciona a gran velocidad. Por ejemplo, el mercado laboral francés. Es imposible desde la política proponer un contrato flexible, pero se ha ido imponiendo en la vida real. Conviven las 35 horas con una gran flexibilidad en el mercado laboral.

P. ¿De dónde parte esa resistencia a las reformas?

R. De todo el mundo. Los franceses sufren esa esquizofrenia ante las reformas. En 2007, Sarkozy llegó al Elíseo con promesas de reformas. Y Hollande, en 2012, también. Pero después nadie las quiere. Los gobiernos son forzados permanentemente a recular en sus proyectos.

P. Esta vez son reformas muy profundas y polémicas.

R. Sí. Las más profundas desde las de François Mitterrand en los ochenta con su reforma en la economía de mercado.

P. ¿Ha iniciado el Partido Socialista una vía socio-liberal?

R. Sí. El PS está sumido en una crisis ideológica. No sabe cuál es su centro de gravedad. Se ha convertido a la economía liberal del mercado. En enero pasado, Hollande oficializó el cambio de la política económica del partido.

P. Pero hay discrepancias internas graves.

R. Hay un grupo que no acepta la orientación de Valls y ahí está la fractura. Como también un grupo del PS que consideran que Europa es demasiado liberal en el terreno económico. En el fondo, esos diputados rebeldes están convencidos de que Hollande va camino de hacer perder a la izquierda las elecciones de 2017. Hay una parte de la izquierda que no acepta que vivimos en un mundo abierto a la competencia y que está en cuestión nuestro modelo social. Es una fractura ideológica histórica.

P. ¿Es Francia hoy el enfermo de Europa?

R. Sí, un poco Pero es paradójico, porque, a la vez, Es paradójico, porque, a la vez, sigue siendo un gran país, un gran potencia económica con una productividad elevada, aunque se haya reducido.

P. El economista Jacques Attali dice que hay resistencia a las reformas porque Francia está llena de corporativismos y rentistas.

R. Eso es verdad.