Palestinos e israelíes insisten en no dar por muerto el proceso de paz
Kerry habla con Abbas y Netanyahu consigue que ambos equipos de diálogo se reúnan de emergencia esta noche
Los palestinos acaban de adherirse a 15 convenciones internacionales cuando debían abstenerse para dar estabilidad al proceso de paz. Los israelíes aprobaron el martes otras 700 viviendas en suelo ocupado y, la semana pasada, no liberaron a los 26 presos prometidos. Ambos rechazan el acuerdo marco que les ofrece Estados Unidos para empezar a dibujar el fin del conflicto y el secretario de Estado, John Kerry, ha anulado el viaje que este miércoles tenía previsto realizar a la zona para arañar compromisos a los dos adversarios.
El rosario de desencuentros haría presagiar un final cercano a las negociaciones Israel-Palestina, retomadas en julio pasado tras tres años sin acercamiento alguno, pero los dos equipos negociadores han insistido esta mañana en que el debate sigue vivo, nadie tira la toalla y lo que hay que hacer es tratar de limar diferencias rápido, en los próximos días. El 29 de abril se acaba el periodo inicial de nueve meses que las partes se dieron para fijar los cimientos de la paz y ambos están dispuestos a seguir hablando. Tras mantener sendas conversaciones telefónicas con el líder de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, y el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Kerry ha convencido este miércoles a los dos equipos negociadores para que acudan a una reunión de emergencia esta noche en Jerusalén para reconducir la situación.
Fuentes consultadas en ambas Administraciones coinciden en que el escenario se ha complicado pero, a la vez, en que la presión que se está ejerciendo sobre él puede acabar forzando algún tipo de consenso mínimo. Todo es posible en Oriente Medio, vienen a decir. Su visión coincide con la que la noche del martes trasladó Kerry, quien dijo que es “totalmente prematuro” hablar de una cancelación de las negociaciones. Un alto funcionario norteamericano ha denunciado este miércoles en Bruselas que los dos adversarios han dado “pasos poco útiles” para facilitar el entendimiento, pero que eso no significa que el proceso acabe, informa Associated Press.
Oficialmente, ese es también el mensaje que esta mañana ha transmitido en rueda de prensa Yasser Abed Rabbo, secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), organismo que comanda las negociaciones con Israel. “No dejamos las negociaciones […] Esperamos que Kerry renueve sus esfuerzos de mediación en los próximos días. No queremos que su misión fracase”, ha defendido en Ramala. Valoraba así el paso dado el martes por el presidente palestino, Madmud Abbas, que decidió firmar 15 convenciones internacionales, reafirmando la carrera por el reconocimiento internacional de Palestina como estado de pleno derecho –hoy sólo es observador, según se votó en 2012 en Naciones Unidas-.
Por petición expresa de EE UU, Abbas había esperado a incorporarse a tratados y organismos mientras durasen los nueve meses primeros de negociación. Sin embargo, como ha repetido Rabbo, ahora se siente “liberado” para dar el paso porque Israel ha “violado” previamente su compromiso de liberar, el sábado pasado, a los 29 presos que faltaban para completar el grupo de 104 que el primer ministro, Benjamín Netanyahu, se comprometió a soltar en ese mismo periodo. Aunque Kerry dijo el martes que los acuerdos firmados no son de la ONU, la lista aportada por la Administración palestina incluye, al menos, nueve tratados redactados y avalados por este organismo. Esta mañana, ante Robert Serry, enviado especial de Naciones Unidas, se ha formalizado la adhesión a convenciones como la de Ginebra, los derechos de la infancia o la que rechaza la tortura.
El portavoz de la OLP ha dicho que la intención palestina era la de superar la “rutina vacía” de reuniones y de incumplimientos y ha insistido en que no quieren seguir “negociando sobre negociaciones”, sino sobre los puntos esenciales en litigio: fronteras y seguridad, refugiados, recursos, Jerusalén… Pese a ello, la embajadora norteamericana ante la ONU, Samantha Power, se ha vuelto a mostrar en contra de toda “acción unilateral”, que es como por costumbre ha calificado su país el intento de Palestina de buscar un reconocimiento mayor en la ONU. Power incide en que “no hay atajos” para lograr un verdadero Estado más que las negociaciones y que dar otros pasos puede ser “tremendamente destructivo”.
Cercana la fecha límite para acordar un principio de acuerdo entre israelíes y palestinos, Washington desea prorrogar los contactos al menos hasta final de año. Es ahí donde ahora deben centrarse los esfuerzos de Kerry, han reconocido Rabbo y también diversos funcionarios de Israel –aunque no ha habido una respuesta oficial al inesperado giro de Abbas-. Palestina insiste en que no habrá prórroga hasta que no salgan sus presos a la calle. La Liga Árabe, por petición de Abbas, ha convocado una reunión de urgencia para el día 9, en la que se analizará esta nueva crisis.
Desde el Departamento de Estado se ha insistido en que ahora "son las partes las que deben de tomar decisiones complicadas" y que "depende de ellos avanzar en el proceso", en la misma línea que defendió Kerry un día antes. El secretario insistió en que ha hecho “tanto como ha podido” por acercar a las dos partes, tras 66 años de conflicto enconado, y que ahora es el momento de que israelíes y palestinos tomen las riendas que permitan salir del actual atolladero. Son ellos, recalcó, los que deben apostar por la paz.
The New York Times y The Washington Post coinciden este miércoles, además, en censurar la posibilidad de que el espía israelí Jonathan Pollard sea liberado por EEUU, como contrapartida por lograr que Israel siga en la mesa de diálogo. Entienden que es “una señal lamentable de desesperación” por mantener a los enemigos sentados en la misma mesa, indica el Times. La Casa Blanca y el Departamento de Estado han negado estos días que el presidente vaya a apoyar la excarcelación del Pollard.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.