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Australia cierra la puerta a los refugiados políticos que lleguen en barco

Los solicitantes de asilo serán derivados a Papúa Nueva Guinea que decidirá si les da refugio

Los primeros ministros de Australia y Papúa Nueva Guinea tras firmar el acuerdo.
Los primeros ministros de Australia y Papúa Nueva Guinea tras firmar el acuerdo.A. S. (AFP)

El primer ministro de Australia, Kevin Rudd, anunció este viernes que su país "no ofrecerá ninguna oportunidad" a los inmigrantes sin papeles que lleguen a territorio australiano por vía marítima con vistas a alcanzar el estatus de refugiado político. "Desde ahora cualquiera que busque asilo y llegue a Australia por barco no tendrá oportunidad de quedarse en territorio australiano como refugiado", declaró Rudd flanqueado por el primer ministro de Papúa Nueva Guinea, Peter O'Neill.

Ambos mandatarios sellaron en la ciudad australiana de Brisbane un pacto para que los inmigrantes sin papeles interceptados en el mar rumbo a Australia sean enviados a los centros de detención ubicados en Papúa, donde se evaluará su petición de asilo.

La novedad es que se cierra toda posibilidad de que Australia les otorgue asilo. Si su solicitud es aceptada, los nuevos refugiados serán reubicados en territorio papuano. Las personas cuya peticiones sean rechazadas serán repatriadas a sus países. La renta per cápita de Australia es la novena del mundo: 44.073 dólares; la de Papúa la 137º con 2.694 dólares.

Con esta nueva política de inmigración, Australia (que debe convocar elecciones generales antes de diciembre) busca frenar el creciente tráfico de personas hacia sus fronteras y en especial a los llamados "migrantes económicos" que hacen el viaje no para huir de la persecución política, sino en busca de una vida mejor en Australia.

Cientos de personas pierden la vida cada año en las aguas del norte de Australia después de pagar miles de dólares a las mafias para que les lleven hasta territorio australiano tras un viaje que dura meses y cruza por varios países.

"Los australianos ya han tenido suficiente viendo gente ahogada en el norte de nuestras aguas", declaró el primer ministro Rudd, que asumió el cargo recientemente tras arrebatar el liderazgo del partido laborista a su predecesora, Julia Guillard.

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A cambio de enviarle a los solicitantes de asilo, Australia financiará un gran hospital regional y una zona universitaria en Papúa, según el diario The Australian, citado por la BBC. 

En lo que va de año, el Gobierno de Australia estima que unas 15.610 personas o 220 barcos han intentado, a menudo sin éxito, entrar en territorio australiano de manera ilegal por vía marítima.

En septiembre del año pasado ambos países firmaron un acuerdo para establecer un centro de detención de inmigrantes indocumentados en la isla papuana de Manus.

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), que ha criticado en varias ocasiones la política australiana de inmigración, denunció las malas condiciones ofrecidas a los inmigrantes en este centro de detención temporal.

Australia y Papúa también acordaron este viernes la ampliación del centro de la isla de Manus para que alcance una capacidad para albergar 3.000 solicitantes de asilo. Ahora dispone de 600 plazas.

El hacinamiento en los pabellones, los problemas derivados de la falta de higiene y el acceso a los servicios médicos, la poca privacidad y el calor sofocante dentro del centro de detención, son algunas de las condiciones de vida de los inmigrantes que critica ACNUR en el campamento de Manus.

La isla de Christmas, por su ubicación cercana a la costa de Java en Indonesia, es uno de los puntos más usados por las bandas de traficantes de personas.

Desde el año pasado, Australia enviaba a las islas vecinas de Papúa y Nauru a los llegados en barco para que sus solicitudes fueran procesadas allí.

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