El primer ministro checo dimite salpicado por un escándalo de corrupción

El primer ministro checo, Petr Necas, se ha visto forzado a anunciar su dimisión este domingo después de que su jefa de Gabinete se haya visto envuelta en un escándalo de corrupción y espionaje, colocando al país de la UE en un periodo de incertidumbre sobre quién formará el próximo gobierno.

Según la Constitución checa, todo el Gobierno tendrá que dimitir ahora, y es muy probable que se produzca un tira y afloja entre la coalición de Gobierno, la oposición y el presidente antes de que haya un relevo.

Necas dimite días después de que los fiscales acusaran a la jefa de su Gabinete, Jana Nagyova, de sobornar a diputados y de ordenar a agentes de inteligencia que espiaran a varias personas. Una de ellas, según los abogados del caso, era la propia esposa de Necas, de la que se está divorciando.

Necas ha dicho no saber nada sobre el espionaje, pero las acusaciones son tan graves que sus socios de coalición le advirtieron de que no podrían seguir apoyándole.

"Dimitiré como primer ministro el lunes", ha dicho en una rueda de prensa tras reunirse con miembros de su Partido Democrático Cívico. Ha añadido que su partido intentaría formar un nuevo gobierno, dirigido por otra persona, para continuar hasta las elecciones, previstas para el año que viene. Sin embargo, no está claro si sus socios de Gobierno o el presidente, Milos Zeman, apoyarán ese plan.

Hace dos décadas, el disidente checo Vaclav Havel lideró la llamada Revolución de Terciopelo que acabó con el comunismo y convirtió a su país en un modelo de libertad. Pero desde entonces, la República Checa ha estado atrapada en la corrupción oficial.

Necas y su Gobierno permanecerán provisionalmente en sus puestos hasta que se forme otro Ejecutivo. El presidente Milos Zeman tendrá un papel importante en el proceso. Si después de tres intentos no se consigue formar gobierno, o el Parlamento acuerda disolverse, se convocarán elecciones anticipadas.

Un abogado de Jana Nagyova, que permanece bajo custodia, asegura que la jefa de Gabinete niega algunas de las acusaciones en su contra, mientras que en otras afirma que ella actuó de buena fe.