La madre que derrotó a un magistrado

Una juez del Tribunal de Justicia del Distrito Federal (México) ha dictado la absolución de Ana María Orozco Castillo, expareja del exministro (magistrado) de la Suprema Corte mexicana Genaro Góngora Pimentel, encarcelada desde hace un año por un delito de fraude genérico. La mujer había denunciado hace unas semanas que Góngora Pimentel había utilizado sus influencias para meterla en la cárcel después de que ella le exigiera el pago de una pensión alimenticia.

El magistrado, ya retirado, había acusado a Orozco de fraude después de que ella pusiera a su nombre la casa que él había comprado para los dos niños que tiene la pareja. Tuvo que pasar un año para que el caso saliera a la luz pública. Después de que Orozco expusiera su caso en el programa radiofónico de Carmen Aristegui –uno de los más escuchados del país–, Góngora Pimentel ofreció una disculpa pública y explicó que “se había dejado llevar por sus emociones de desconcierto” al utilizar sus influencias en contra de su exmujer debido a una “situación” que vivían los niños “al lado de su señora madre”.

La pareja llevaba separada seis años cuando Góngora Pimentel exigió la custodia de los niños, después de que Orozco pidiera el pago de una pensión alimenticia por 50.000 pesos mexicanos mensuales (unos 3.900 dólares) al mes, equivalente al 35% del salario del exmagistrado. Entre los argumentos que él había utilizado para no pagar esa cantidad estaba que los niños (a quienes en los documentos del juicio se refiere como “mis acreedores alimentarios”) eran “de clase media baja” y por tanto, “pertenecían a otro estrato social”. También decía que los niños, que sufren de autismo, estaban “imposibilitados para divertirse”, por tanto, no debía pagar dinero que sería utilizado para entretenimiento.

Desatado el escándalo, bastaron dos semanas para que Orozco saliera de la cárcel. La Comisión de Derechos humanos de la capital mexicana anunció que revisaría la actuación de la justicia y el defensor capitalino, Luis González Plasencia, afirmó que el caso se reabriría debido a “la existencia de nuevos elementos”. El propio exministro ofreció retirar la demanda contra su exmujer.

Góngora Pimentel era conocido como uno de los jueces “progresistas” de la Corte Suprema: fue uno de los que apoyó que se mantuviera la legislación que permite el aborto en la capital de México. El excandidato presidencial Andrés Manuel López Obrador, que se presentó por una coalición de izquierdas, había dicho en 2012 que, de ganar las elecciones, lo invitaría a formar parte de su gabinete. En su disculpa pública, difundida el 24 de mayo –un día después de la denuncia radiofónica de su expareja–, el exministro se define como “un partidario de la justicia y de las causas sociales” y refrenda que es “un opositor de la corrupción y tráfico de influencias”.