La Haya cierra los juicios balcánicos
El Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia concluirá su misión en 2014. El líder de los serbios de Croacia, Goran Hadzic, será el último caso
Las guerras de los Balcanes fueron una tragedia interétnica, y la cercanía de las comunidades enfrentadas entre 1991 y 2001 ha hecho que el núcleo de los casos juzgados por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) sea común. A veces, por el escenario de los crímenes, que aparece en varios procesos. Otras son los testigos, víctimas o expertos, llamados por ambas partes. Sus declaraciones son válidas, pero ahora que el Tribunal se acerca al cierre de sus actividades —previsto para 2014— algunas reglas se han ajustado. Un ejemplo palpable ha sido el juicio por genocidio y crímenes de guerra y contra la humanidad contra Ratko Mladic. Antes de recibir ayer al primer testigo de la acusación, los jueces advirtieron que las declaraciones de todos los llamados (solo el fiscal espera a 400) debían aportar nuevos datos. “No hay que repetir pasajes que consten ya por escrito, o vengan de otros procesos”, dijo Alphons Orie, presidente de la sala.
En estos momentos, el TPIY tiene abiertos ocho casos, incluido de Mladic. Los acusados fueron líderes de sus comunidades, serbobosnias, serbocroatas o kosovares, y responden a nombres que se han hecho famosos. Entre ellos, el antiguo líder político serbobosnio Radovan Karadzic, acusado del mismo genocidio de Srebrenica que Mladic, tal vez sea el más notorio. Huido durante 12 años, fue arrestado en 2008 en Serbia. Se ocultaba bajo una poblada barba y larga cabellera. Vojislav Seselj, el líder ultranacionalista serbio y fundador del Partido Radical de Serbia, protagoniza otro de los sumarios en marcha. Imputado por instigar la persecución y asesinato de civiles no serbios, el fiscal ha pedido 28 años de cárcel.
Ramush Haradinaj, antiguo primer ministro de Kosovo, aguarda también sentencia. Responde de crímenes de guerra perpetrados en Kosovo en 1999. Aunque fue absuelto en 2008, un aparte del juicio volvió a repetirse en 2010, porque hubo intimidación de los testigos. Ahora los fiscales piden 20 años de prisión. Sobre Zdravko Tolimir, antiguo comandante del Ejército serbobosnio a las órdenes de Mladic, pesa asimismo el genocidio de Srebrenica. Aquí, las alegaciones finales están previstas para agosto próximo.
Junto a estos casos en marcha, el Tribunal prepara el último de su serie. Es contra Goran Hadzic, expresidente de los serbios de Croacia. Detenido en 2011 tras ocho años de fuga, responde de la masacre de Vukovar. En 1991, el hospital de dicha localidad, al este de Croacia, fue escenario del asesinato de 200 pacientes y civiles croatas. La matanza se atribuye a paramilitares serbios y miembros del Ejército Popular Yugoslavo, cuyo líder era Hadzic mismo.
En conjunto, el Tribunal ha completado ya 55 casos y tiene otros seis en fase de apelación. Cuando cierre sus puertas, quedará abierto un tribunal de reserva. Sus miembros aplicarán lo que oficialmente se denomina mecanismo residual. Es decir, cerrarán los sumarios que corresponda hasta cerrar todos los casos del TPIY. “El éxito del Tribunal depende de cómo operen las distintas cortes de los Balcanes. También hay criminales juzgados allí, a domicilio. Pero los países surgidos de la guerra no contemplan la extradición entre ellos, y no es fácil. Con todo, la colaboración con el TPIY es buena y tenemos esperanza”, precisa Serge Brammertz, fiscal jefe del Tribunal.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.