_
_
_
_
_

Javier Sicilia vapulea a los cuatro candidatos a la presidencia de México

Los políticos acuden a la llamada del movimiento de víctimas en plena campaña electoral

Inés Santaeulalia
Javier Sicilia besa a Enrique Peña Nieto.
Javier Sicilia besa a Enrique Peña Nieto.A. ESTRELLA (AFP)

No accedieron a sentarse todos juntos, pero uno tras otro, los cuatro candidatos a presidir México han desfilado este lunes ante el grupo de víctimas Movimiento por la Paz. Ninguno quiso faltar a la cita, que ha acabado resultando para todos más complicada de los esperado. El líder del movimiento, el poeta Javier Sicilia, ha repartido a lo largo de la mañana críticas por doquier. No se ha escapado ni Josefina Vázquez Mota, volcada por entero a mostrar su papel de madre, ni Enrique Peña Nieto, que ha seguido su guion sin despeinarse, ni Andrés Manuel López Obrador, con su ya repetitivo discurso de que es el único candidato diferente. Tampoco ha salido ileso Gabriel Quadri, con tantas posibilidades de ganar las elecciones como cualquier otro ciudadano de a pie y que ha acabado completamente cubierto por la sombra de la líder del sindicato de maestros Elba Esther Gordillo, la temida Maestra.

Sicilia no ha tenido clemencia con ninguno y ninguno se ha atrevido a elevar la voz para replicar durante las seis horas que ha durado el acto en el Castillo de Chapultepec (Ciudad de México). Al candidato del PRI, Enrique Peña Nieto, primero en todas las encuestas, lo ha despedido con una retahíla de nombres de priístas involucrados en casos de corrupción que el candidato ha escuchado sin mover un músculo del rostro. "¿Cómo piensa darle vida a una democracia que su partido nos ha arrancado?", ha inquirido el poeta. "México necesita construir nuevas condiciones y nuevas reglas", ha dicho el político en su turno de palabra.

El poeta despide a Peña Nieto con una retahíla de priístas involucrados en casos de corrupción

Al poeta se ha sumado la declaración de una mujer del pueblo de Atenco (Estado de México), un municipio que vivió en 2006 unos violentos disturbios y en el que la actuación policial -ordenada por el entonces gobernador del Estado, Peña Nieto- acabó con la muerte de dos jóvenes y decenas de denuncias por violación. "Lamento los excesos cometidos. Hoy digo que ese escenario de Atenco me dejó mayores lecciones para saber que ese tipo de capítulos deben hacerse bajo otros protocolos", ha replicado el político en una respuesta que ha hecho revolver al poeta. "Usted no vibra con las víctimas, hace un discurso frío, muy parecido al viejo PRI. Eso me aterra, nos aterra a todos. Tampoco le oí una mención a todos los delincuentes de su partido, los queremos ver fuera del universo político y a otros los queremos ver en las cárceles. Tiene responsabilidades muy graves aquí usted", le ha espetado antes de irse.

Poco antes del priísta había salido a escena Vázquez Mota, quien pese a la dulzura de sus palabras con la víctimas, a las que ha hablado de "mamá a mamá", también ha tenido que vérselas con el líder del movimiento. Haciendo gala de una memoria prodigiosa -o de un encuentro minuciosamente preparado- el líder ha contrarrestado cualquier pavoneo de la política. "Dice que en su partido hay gente muy decente, pero te recuerdo a Marco Antonio Adame, que es un imbécil, a Molinar Horcasitas, ese Herodes que sigue impune". La panista ha querido entonar el mea culpa, mostrando más reflejos que Peña Nieto, y ha pedido perdón por todos los gobernadores de su partido que, en algún momento, han podido no atender a las víctimas.

Vázquez Mota y Sicilia
Vázquez Mota y SiciliaS. Gutiérrez (EFE)
Únete a EL PAÍS para seguir toda la actualidad y leer sin límites.
Suscríbete

Esa indiferencia de las autoridades es precisamente la mayor queja de los que sufren la violencia, cuyos relatos siempre diferentes acaban al final en un mismo punto: "Me dijeron que si quería encontrar a mi hija, la buscara yo misma". Eso le ha contado entre lágrimas Margarita López a la candidata, pero ni siquiera los buenos deseos de la panista de acompañarla en la búsqueda de su hija desaparecida han esquivado el reproche. "Te lo agradecemos", le ha dicho Sicilia justo antes de recordarle otro caso en el que también se había comprometido con otra mujer y al final sus palabras acabaron en papel mojado.

Tampoco ha salido mejor parado el candidato del PRD, Andrés Manuel López Obrador, que nada más sentarse ha tenido que escuchar del poeta: "Para muchos usted significa la confrontación, la intolerancia, el mesianismo, la incapacidad de autocrítica y la revancha sin matices". Así de directo, en frío. El político ha hecho un esfuerzo sobrehumano por diferenciarse del resto de candidatos erigiéndose en el único que "no tiene nada de qué avergonzarse". "Javier, a mí no pueden meterme en el mismo costal", ha pedido.

López Obrador ha querido animar a la ciudadanía a votar el próximo 1 de julio, lo que ha valido otro encontronazo con el poeta, que hace poco más de un mes dijo que su intención era la de hacerlo en blanco. "Yo no he llamado a no votar, yo digo lo que yo hago. Si ustedes piensan que yo oriento a la ciudadanía por decir lo que voy a votar es que ustedes creen que la ciudadanía es imbécil", ha dicho Sicilia.

La panista entona el mea culpa y pide perdón por todos los gobernadores de su partido que han podido no atender a las víctimas como merecen

El movimiento, que ha ido intercalando las intervenciones del poeta con relatos de las víctimas, ha invitado a los candidatos a comprometerse con cuatro puntos: Justicia para las víctimas, cambio de la estrategia de seguridad, atacar la raíz económica del conflicto e impulsar un combate frontal al lavado de dinero y la democracia participativa y democratización de los medios de comunicación.

El candidato del PRD ha sellado su compromiso de asumir todo lo planteado en el documento. La líder del PAN también ha dicho que "sí" a los cuatro requerimientos aunque, con el peso de los más de 60.000 muertos que ha dejado en seis años la actual estrategia de guerra contra el narcotráfico dictada de su partido, Vázquez Mota ha respondido al deseo de las víctimas de devolver a los militares a los cuarteles con una proposición de futuro: "Desmilitarizaremos en el menor tiempo posible, cuando haya cuerpos policiales en los que crea y confíe la ciudadanía".

Otro que ha querido asumir por completo las peticiones de las víctimas ha sido el candidato de PANAL, Gabriel Quadri, al que ni siquiera le ha servido el uso reiterado de la frase que acuñó el Movimiento por la Paz cuando nació hace un año tras el asesinato del hijo del poeta: "Estamos hasta la madre". El hecho de que sea el candidato del partido de la líder sindical Elba Esther Gordillo ha anulado todas sus opciones de salir indemne. "Está bien todo lo que dices, pero lo que hay detrás de tu candidatura es la corrupción". Así ha rematado Sicilia su mañana de careo con los candidatos, a los que les ha pedido que antes del próximo debate televisivo (el 10 de junio) alcancen un acuerdo de unidad nacional en materia de seguridad para evitar ahondar en la fragmentación de un país "herido".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Inés Santaeulalia
Es la jefa de la oficina de EL PAÍS para Colombia, Venezuela y la región andina. Comenzó su carrera en el periódico en el año 2011 en México, desde donde formó parte del equipo que fundó EL PAÍS América. En Madrid ha trabajado para las secciones de Nacional, Internacional y como portadista de la web.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_