Alemania expulsa a cuatro diplomáticos sirios por espionaje

Siria ha recibido nuevos reveses diplomáticos mientras su Ejército se afana en luchar contra los rebeldes en Homs, principal bastión de la resistencia contra Bachar el Asad, según el opositor Observatorio Sirio para los Derechos Humanos. El Gobierno alemán ha expulsado a cuatro diplomáticos sirios, dos días después de que la policía federal detuviera en Berlín de dos presuntos espías acusados de rastrear a opositores del régimen de Damasco. Los funcionarios sirios tienen que abandonar Alemania en los próximos días. Se trata de tres hombres y una mujer, todos ellos empleados en la Embajada de Siria en la capital alemana.

Según el comunicado emitido por el ministro de Exteriores, Guido Westerwelle, el embajador de Siria fue informado sobre la medida. El ministro recuerda que el jefe de la legación fue convocado el día 7 para comunicarle que Alemania no tolerará actuación alguna contra la oposición siria en su territorio.

Amnistía Internacional (AI) ya denunció en octubre pasado en un informe titulado "La larga mano de la Muhabarat" (el servicio de inteligencia sirio) el acoso sistemático a una treintena de activistas sirios por diplomáticos y empleados de las legaciones sirias en ocho países: Canadá, Chile, Francia, Alemania, Suecia, Reino Unido, Estados Unidos y España. Manifestantes y opositores al régimen se han quejado de ser filmados y fotografiados desde las sedes diplomáticas para después presionar a sus familias en Siria.

Westerwelle ha relacionado las expulsiones con las detenciones del martes. Hay firmes sospechas de que los cuatro expulsados desarrollaban actividades “contrarias al derecho diplomático”, si bien no hay indicios de que usaran ningún método “más allá del espionaje”, ha indicado. Se investiga si se implicaron en otras actividades delictivas, en cuyo caso habrá nuevas medidas. Las autoridades alemanas creen que los supuestos agentes secretos detenidos llevaban años buscando a opositores al régimen de El Asad residentes en Alemania. Tras la detención —uno tiene nacionalidad alemana— trascendió que ambos mantenían contactos con la embajada. Westerwelle ha convocado al embajador sirio para expresarle que Alemania “no permitirá ningún tipo de coacción” en su territorio contra ciudadanos sirios.

También las autoridades libias han dado un plazo de 72 horas al encargado de negocios sirio y al resto del personal de esa embajada en Trípoli para que abandonen Libia, según ha informado el Ministerio de Exteriores. El Consejo Nacional de Transición (CNT) libio es el único Gobierno que hasta el momento ha reconocido como autoridad legítima de Siria al opositor Consejo Nacional Sirio, que agrupa a buena parte de las formaciones políticas en el exilio aunque no comparten las mismas estrategias. El pasado martes las monarquías árabes del Golfo expulsaron a los embajadores sirios y llamaron a consultas a los suyos. Varios países europeos, entre ellos España, también llamaron a sus embajadores.

Por otra parte, la ONU volvió a arremeter contra El Asad. La representante especial del secretario general para los Niños en los Conflictos Armados, Radhika Coomarswamy, exigió al Gobierno sirio que detenga los asesinatos, las torturas, las mutilaciones y las detenciones de menores. En un comunicado, la representante denuncia los “malos tratos y actos equivalentes a tortura que han causado la muerte de niños”, sobre todo en Homs, informa Efe. Añade que tiene constancia de “casos de detenciones de niños a quienes se les acusa de pertenecer a grupos armados”.