El cuello de botella del crudo mundial

El estrecho de Ormuz es la ruta petrolífera más importante del mundo. Irán ha amenazado con bloquearla en varias ocasiones si Occidente le impone sanciones a sus exportaciones.

Un pasillo estratégico. El canal es una estrecha franja de agua que separa Omán de Irán y que conecta a los mayores productores de petróleo del Golfo, como Arabia Saudí, con el Golfo de Omán y el Mar Arábigo.

15,5 millones de barriles al día. En torno a un 33% del petróleo transportado por mar pasó por el estrecho en 2009, un 17% de todo el crudo comercializado. En total fueron 15,5 millones de barriles al día, según datos de la Administración de Información de Energía de EE UU, país que patrulla con sus buques de guerra la zona para vigilar el flujo de petróleo.

La mayoría del petróleo exportado a través del estrecho viaja a Asia, EE UU y Europa Occidental. Alrededor de tres cuartas partes de las importaciones de petróleo de Japón y un 50% de las de China pasan allí.

Rutas alternativas. Fuentes de la industria citadas por la agencia Reuters aseguran que Emiratos Árabes Unidos podrían comenzar a bombear petróleo a través de un gasoducto, con una capacidad de 2,5 millones de barriles al día, que permitiría evitar el estrecho. Hay otras vías fuera de uso actualmente, como el oleoducto iraquí a través de Arabia Saudí.

Un estrecho amenazado. Irán podría sembrar de minas el estrecho, como ya hizo durante la guerra contra Irak en los años ochenta. Sin embargo, allí está presente la Quinta Flota de EE UU, con sede en Bahréin, que vigila las rutas en el Golfo y alrededores.

Incidentes. El más reciente, el atentado contra el petrolero japonés M. Star, ocurrió en julio de 2010. Las Brigadas de Abdulá Azzam, un grupo islamista que mantiene lazos con Al Qaeda, reivindicaron el ataque.