Dimite el ministro de Justicia de Japón tras jactarse de que su trabajo es fácil
La oposición había amenazado con boicotear el presupuesto en el Parlamento
El ministro de Justicia de Japón, Minoru Yanagida, ha dimitido hoy tras el revuelo causado por unas desafortunadas declaraciones en las que afirmaba que su trabajo es fácil y que han sido interpretados como una falta de respeto a la Dieta (Parlamento). La agencia local Kyodo ha informado de que Yanagida, que solo llevaba en el cargo desde septiembre, ha comunicado su decisión al primer ministro, Naoto Kan, antes de que el opositor Partido Liberal Demócrata (PLD) presentase una moción de censura contra él hoy mismo y ante la amenaza de que boicotearía la aprobación del presupuesto extra en el Parlamento. La renuncia complica la gestión del jefe del Gobierno, cuya popularidad ha caído por debajo del 30% tras solo cinco meses en el poder.
Hace una semana, Yanagida, de 56 años, afirmó en un discurso en su circunscripción de Hiroshima, al oeste de Japón, que ser ministro de Justicia de Japón "es fácil" porque solo tenía que recordar dos frases si le hacían preguntas comprometidas en la Dieta. "No debo hacer comentarios en casos individuales" era una de las frases. La otra, era: "Estoy actuando de forma apropiada de acuerdo a la ley y a las pruebas". Estas palabras han causado una gran conmoción en la opinión pública, que en los primeros cinco meses de Gobierno ha retirado paulatinamente su apoyo al primer ministro.
El presupuesto, en cuestión
En una rueda de prensa para explicar su salida, el ministro ha admitido que sus declaraciones fueron "imprudentes" y provocaron "controversia" hasta el punto de afectar al debate sobre la ampliación presupuestaria, crucial en el programa del Gobierno. "El primer ministro me ha instado a entender que, por el bienestar de la población, es necesario que el presupuesto extra para este año fiscal sea aprobado por el Parlamento lo antes posible", ha explicado Yanagida, de 56 años y con dos décadas de experiencia parlamentaria. Poco antes, el jefe del Gobierno ha calificado de "inevitable" la renuncia de su ministro de Justicia por la necesidad de garantizar la aprobación de ese presupuesto suplementario, de 4,4 billones de yenes (38.900 millones de euros) y destinado a reactivar la economía japonesa, según Kyodo.
La renuncia de Yanagida ha sido aprobada ya por el Gobierno japonés y su puesto será ocupado, de forma interina, por el ministro portavoz, Yoshito Sengoku, según la cadena de televisión NHK. La oposición ha aplaudido la dimisión del ministro, que el líder del PLD, Sadakazu Tanigaki, ha definido de "normal" tras la polvareda desatada por sus declaraciones. Para otros, como el senador de la oposición Yoichi Masuzoe, la salida de Yanagida llega "demasiado tarde", al haberse demorado varios días durante los que negó que fuera a dejar su cargo.
El ministro de Justicia apenas ha estado dos meses en el cargo, en los que no le ha dado tiempo a firmar sentencias de muerte, como sí hizo su antecesora, Keiko Chiba. Yamagida se convirtió hoy en el primer ministro que dimite desde que Naoto Kan reestructuró su Gobierno a mediados de septiembre, tras ser reelegido presidente del Partido Democrático (PD) y por tanto reafirmado como jefe de Gobierno.
La causa de la baja popularidad de Kan, que asumió el poder en junio de este año, está en parte en los recientes conflictos en política exterior con Rusia por las islas Kuriles o Territorios del Norte, y con China por las islas Senkaku o Diaoyu. Su soledad se refleja también en la cámara legislativa, donde puede complicarse la aprobación de los presupuestos generales de 2011, en los que se prevé un importante plan de estímulo económico, según explica la cadena británica BBC.
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