Un atentado causa 20 muertos y más de 100 heridos en Irak

Un atentado con una bomba en una motocicleta ha causado una nueva matanza religiosa en Irak. Al menos 20 peregrinos chiíes han muerto y otros 110 han sido heridos a las puertas de la ciudad santa de Kerbala, a 80 kilómetros al sur de Bagdad. Al oeste de la capital, una explosión ha matado a otra persona y herido a tres. Es el tercer atentado contra fieles de esta confesión que se produce en Irak en la última semana.

Más de 40 personas murieron el pasado lunes cuando una suicida se inmoló en una carpa habilitada en un barrio de Bagdad para resguardar a quienes inician el camino hasta Kerbala, donde se celebra el Arbain, que marca el inicio de los 40 días de luto por la muerte del nieto de Mahoma. Otras tres fallecieron el martes.

La población chií, mayoritaria en Irak, se ha convertido en el objetivo de la insurgencia desde que, en 2003, la invasión estadounidense derrocó al régimen suní de Sadam Hussein. La violencia sectaria saltó de nuevo a las portadas cuando, el pasado diciembre, un atentado mató al menos a 23 personas en la víspera de la fiesta de la Ashura. Los terroristas amenazan así la estabilidad del Gobierno del presidente Nuri al-Maliki, cuya principal baza de cara a las elecciones de marzo es la reducción de la violencia en los últimos dos años.

"Siento ver que los políticos iraquíes no escatiman esfuerzos para preparar las próximas elecciones mientras las bombas hacen pedazos los cuerpos de inocentes", comenta a Reuters Abdul-Amir Hassan, un profesor de instituto de 41 años que ha pasado una semana de camino a Kerbala. "Los recientes ataques terroristas sobre peregrinos por todo el país muestran la confusión e inoperancia de las fuerzas de seguridad para abordar una situación delicada como la del Arbain", concluye. Las autoridades iraquíes han movilizado 30.000 efectivos para el dispositivo de seguridad que debe proteger a unos seis millones de peregrinos.

Desde que empezó el año han muerto casi 200 civiles en Irak, algo más de la mitad de las 306 víctimas registradas el pasado diciembre. Al menos 100.000 iraquíes han sido asesinados en los seis años y medio de invasión, según fuentes citadas por Reuters.