_
_
_
_

La Europa suicida

Una vez más, Italia marca el camino. Lo ha hecho con frecuencia para lo mejor: el Renacimiento. También para lo peor: el fascismo. O lo de ahora: la virulenta expulsión de la comunidad inmigrante de Rosarno, en Calabria, después de unos enfrentamientos entre los locales y los jornaleros agrarios africanos. El rechazo del otro, la fobia del extraño y el racismo no son exclusiva de nadie: partidos protofascistas, iniciativas xenófobas y legislaciones represivas proliferan desde Vic hasta Copenhague. Pero el vanguardismo italiano, facilitado por la mezcla de la fría política de los negocios con las ideologías calientes de la exclusión, ha dado una de las legislaciones más severas contra los inmigrantes de toda Europa y la mayor desprotección posible del Estado hacia los extranjeros.

Precisamente donde peor suelen ir las cosas es allí donde el Estado se retira, dejando un vacío que sólo llena la delincuencia. El contexto no es únicamente de rendición gubernamental en el mantenimiento del orden público y el imperio de la ley. Calabria tiene el récord de evasión fiscal y es a la vez una región subsidiada y carcomida por la corrupción. No es el caso de un Estado mínimo thatcheriano, sino de un Estado privatizado y confundido con el poder económico de Silvio Berlusconi, ocupado estos días, como durante toda su larga etapa en el poder, en sortear sus procesos judiciales y conseguir la inmunidad ante los jueces, mientras sus socios de la Liga del Norte se dedican a aplicar y difundir sus contundentes ideas acerca de la inmigración.

El mal estado de la economía y el incremento de las cifras del paro son más combustible sobre estas brasas ardientes, pero no deben llevar a confundirnos. El problema central con el que se enfrenta Europa es el de construir un modelo eficaz, respetuoso y civilizado de integración de sus inmigrantes, que permita absorber la mano de obra necesaria para mantener su riqueza, sus valores y formas de vida y sobre todo el Estado de bienestar. Éste es el reto que plantea un mundo cambiante, en el que las próximas cuatro décadas contemplarán cómo Europa se encoge de forma drástica respecto al resto del planeta, tanto en su demografía como en su producto interior bruto y no digamos ya en su capacidad de acción política, merced esta última a su ya proverbial indolencia.

Este mes China ya ha superado a Alemania como primer país exportador y a Estados Unidos como primer mercado automovilístico del mundo. Durante 2010 puede superar a Japón en cifras de PIB, convirtiéndose en la segunda economía mundial detrás sólo de EE UU. En las cuatro próximas décadas Europa perderá a espuertas peso, riqueza y poder no sólo en relación a China sino a Brasil e India. Según ha señalado Felipe González, en un adelanto de sus reflexiones sobre el futuro del continente, para mantenernos en la carrera, empezando por la interior de nuestras economías y nuestro modelo de sociedad, necesitaremos para 2050 nada menos que 70 millones de trabajadores inmigrantes nuevos.

Frente a estos cambios radicales, la reacción digamos que espontánea de la población europea es conservadora y defensiva: ante la pérdida de peso y centralidad, la pluralidad y la diferencia, atrincherémonos en nuestra identidad e ideología. La lista es larga: el referéndum suizo contra los minaretes, la prohibición francesa del velo en las escuelas, el discurso de Ratzinger en Ratisbona, el ascenso de partidos xenófobos, las modificaciones en las leyes de asilo e inmigración o la hostilidad francesa y alemana al ingreso de Turquía en la UE. Como resultado, la imagen de una Europa fortaleza, que expulsa y criminaliza a sus inmigrantes, está pegando fuerte, mucho más de lo que se percibe desde la propia Europa, en todo el resto del mundo.

Contrariamente a lo que dice el manual progresista al uso, el suicidio de Europa no es la aplicación de un proyecto de extrema derecha. O no sólo. La tierra donde crece son las tensiones y dificultades que sufren sobre todo los más desasistidos: en Calabria hay también una guerra entre pobres. Desde los suburbios franceses lepenizados hasta los parados calabreses que la 'Ndrangheta manipula, la base social más genuina del populismo y de las pestes negras del signo que sea son siempre los menos favorecidos. Luego está el abono que los hace crecer: ese Estado ausente, corrupto y privatizado. Y una lluvia fina mediática hecha de antiprogresismo, incorrección política y comunitarismo occidental disfrazado de universalismo. Al fin lo que tiramos por la borda son los valores genuinamente europeos, las ideas de la Ilustración que han sido hasta ahora la tracción de la modernidad occidental. Por este camino, primero perderemos el alma, pero después lo perderemos todo, Estado de bienestar incluido.

Comentarios

Hace muchos años que Europa dejó de estar a la vanguardia. Ha estado demasiado tiempo a la zaga de EEUU y ahora que estos tienen problemas Europa improvisa sin sentido.http://enclaveinternacional.wordpress.com/
Felipe González decía ayer en los desayunos de las 9 en TVE 1 ante varios periodistas entre los que se encontraba Estefanía, que confía en la inteligencia del ser humano para superar las dificultades. Mucho me temo será necesario algo más que inteligencia para salir del pozo en el que estamos sumergidos los europeos y por ende los españoles. Ya hace tiempo parece que Europa no cuenta a escala planetaria y el reparto de fuerzas está dispuesto con EEUU como país de servicios de base capitalista y los países emergentes como países suministradores de mano de obra barata con todos los bienes, productos y servicios asequibles, evitando la inmigración a EEUU y los problemas añadidos. Con la lección del fiasco financiero bancario, sólo nos queda esperar a la siguiente mordedura. Siguiendo el fraude bancario con su sistema monetario y red de vigilantes financieros y de guinda la gripe A, para ponernos a tono de cómo se esquilman las cajas de los estados ante la mirada atónita de los ciudadanos y la impasibilidad de los gobernantes. Los tragas neocapitalistas ya no saben que inventar para devorar y arrasar cuanto se les pone por delante a costa de los incautos ciudadanos que quedan a la espera de la siguiente oleada de pillaje. Así, el problema de fondo en la esencia es la dictadura y tiranía que controla la propiedad económica del dinero para unos pocos privilegiados. Mientras el dinero no esté a libre disposición de todos los ciudadanos, como las carreteras y las calles, no se podrán circular e intercambiar libremente los bienes, productos y servicios. Con todo mientras no se suprima la tiranía y dictadura del dinero y se disponga del mismo libremente como bien universal, como medio e instrumento de intercambio no habrá progreso posible ni solución a las causas de la crisis y los problemas implícitos con el sistema económico en Europa principalmente y en el Mundo entero hasta que asome la próxima crisis que será de consecuencias peores sino se pone remedio pronto.
Muy buen articulo editor, el analisis destapa una realidad que cada vez se hace mas cruda, que se repite una y otra vez y de la que no aprendemos. Y esto no ha hecho mas que empezar, esperemos que los nuevas economias emergentes sepan hacerlo mejor por que aqui ya llevamos tiempo y no hay manera.
somos muchos los que pensamos que la oleada de inmigrantes era excesiva ya hace más de 4 años. Ningún pais, por rico que sea, y España se ha demostrado que no lo es, puede soportar semejante incremento de población en un periodo de tiempo tan corto; máxime cuando una parte muy importante de esa inmigración ni ha cotizado, ni cotiza, ni cotizará con sus impuestos. Lo que pasaba es que como el cilo económico era positivo (de forma artificial), las cosas podian ir pasando, pero ahora se ha demostrado que los únicos que han salido ganando con el tema de la inmigración son los empresarios y las ong,s, unos explotanto a los inmigrantes, los otros viviendo a cuenta de ellos con dineros públicos, con lo que resulta que, como siempre, los que acabamos pagando (nunca mejor dicho) el pato somos los trabajadores. No os quejeis si la serpìente resurge, porque vosotros sois también culpables de ello.
Más dura será la caída, Bassets. Sin duda, la falta de un liderazgo definido influye y en cierto modo, el "would-be¨ del Estado Europeo está maniatado por sus medianías nacionales,añadiendo una burocracia que tiende a crecer, y no en eficacia precisamente. ¿Se imagina a un gigante lento y obeso, maniatado de pies a manos por múltiples riendas, dando tumbos indecisos con sus ojos vendados? La visión de una Europa esclerotizada, con una población cada vez más envejecida y más conservadora va camino de hacerse realidad a los ojos de las potencias emergentes.China ya nos ve así. Ojo, que la idea de una Europa unida en consensos es muy noble, y viene de antiguo.Además, vivimos bien, y en relativa paz con nuestros vecinos. Pero eso no basta. Si queremos conservar eso en un futuro, tendremos que sudar mucho. Ya perdimos demasiado tiempo.
Estimado Lluís Bassels,leí su artículo titulado: La Europa suicida, tiene usted muy claras las ideas, ¿cómo es que El País no las tiene? Podría explicarme eso.
A mi me parece que tan suicida y peligroso es hacer demagogia xenófoba como buenista con la inmigración. Ni "todos fuera" ni "papeles para todos". Porque, claro, no basta con decir que el Estado debe encargarse de esto, y garantizar lo otro, y procurar aquello si no se señala de donde piensa sacar el dinero para todo. ¿Cuantos pobres hay en el mundo? Pues solamente en la India alrededor de 600 millones. La pregunta es ¿Caben todos ellos en Europa?. Con un deficit disparado, creo que ni el mismisimo Harry Potter pueda solucionar el problema aritmético. Y si se producen avalanchas migratorias descontroladas en un Estado sin medios para atenderlas, encauzarlas y integrarlas, ¿cual será el resultado esperable? ¿Que esos inmigrantes vivan como europeos, o más bien que los locales terminen viviendo como africanos? Resumiendo, inmigración sí, pero controlada e integrable en las sociedades de acogida.
Muy bien, pero con una puntualización: Si Euripa necesita inmigrantes para mentener su nivel de bienestar, venga pues, que vengan inmigrantes para que podamos seguir viviendo bien. ¿No estamos creando un gran vacío, una injusticia, un problema mayor, e inmediato a aquellos países a los que arrebatamos los trabajadores? ¿No será mejor un término medio en el que todo el mundo mundial viva mejor? ¿O eso no interesa? Le pido una reflexión. Saludos muy cordiales.
Sr Bassets : creo humildemente que Europa perdió su alma hace tiempo. Su descristanización a manos de las corrientes "progresistas" promoviendo el aborto y otras cosas por el estilo, hacen que hoy (oh paradoja!!) calculen que necesitan para el 2050 algo así como 70 millones de emigrantes. Sospecho que en ese período se podría contar holgadamente con esa cifra, si no se abortara a piacere. Atentamente, Ricardo Inciarte
…Ay, Lluis, lo aquí dejo nada tiene que ver con tu articulo, bueno, no indirectamente porque estoy desolucionado con Obama. El hombre se manda discursos con finura académica, para que todos lo entiendan… pero en la realidad, conociendo el carácter y naturaleza depredadora del ser humano, dudo que este moreno pase a la historia como un “grande”… ya ves, aquí en la América del norte ya no lo queremos, primero: estamos disgustado con su política sanitaria, estamos disgustados por su intransigencia internacional con la guerra afgana; estamos cansados de ver los números de aumento en el desempleo 17% (sumando esos que ya se cansaron de buscar trabajo), estamos cansado de su retórica pedante que son todas aburridas, somníferas, llenas de idealismo para un hombre de 46-7 año de completa ingenuidad que ya nadie compra como remedio porque no ha curado a nadie todavía y no curará aun si se queda otros cuatro, aunque lo dudo… estamos cansados de hacer guerras Proxy con plata china que es la nación que esta pagando las guerras en estos momentos… cansados del las trillonadas de dólares en deuda nacional, los hijos de mis hijos deberá pagar esa cuenta… cansados de lúdicos, idealistas marxilogos, socialistas, anarcos, unitarios, guardianes, vigilantes de la justicia y de la paz… cansados de este hombre de color que lo único que ha hecho es vivir la nación aun más entre lo blanco y lo negro, lo rojo y lo amarillo, lo café y lo verde (los verdes ambientalistas)… Pues, el pueblo quiere que Obama se vaya y yo por mi parte estoy trabajando para que eso se haga posible porque realmente creo que este país necesita un NO apologético de ideológicas liberales… América ya ha hecho bastante por el mundo, más que cualquier otra nación y este país no necesita besarle a nadie el trasero para vender nuestro mercado… este país necesita un hombre de carácter y de liderazgo verdadero, no un abogado de izquierda con aplicaciones marxista… Obama debió quedarse en sala de clase y nunca debió correr para presidente… Y es que ahora se le nota (y todos los notan) que lo lamenta... El tono de su voz es opaco, la perdida de brillo de la inauguración se fue, y la contaminación mundial de los vampiros cayó sobre sus hombros y comienzan a chuparle la sangre… y él lo sabe muy bien que el mundo “nuevo” al que aspiró cuando juró en la Biblia y frente al mundo entero, no iba cristalizar esos sueños socialistas que su esposa orgullosamente vistió en su traje negro y rojo (los colores favoritos de la anarquía socialista)… el Mundo se le quedo demasiado grande para ella que ahora se dedica al cultivo de flores y patata en el jardín de la casa blanca y Obama sabe que no es el carácter que una nación de 300 millones de seres humanos, paganos acostumbrados por cultura a ser el eslabón número uno de la cadena alimenticia con más de 200 bases militares en el mundo necesita para contener tragedias, guerras, calamidades naturales (Haití)…. Sinvergüenzas, terroristas, ladrones de fondos bancarios y enfrentarse a la mayor contención política del país que lo ha frenado y que lo han utilizado como canino de calle: el congreso, senado y los avarientos fauces del lobby empresarial, poderosa oligarquía y dueña del país y las vidas que depende de ellos ahora se lo están comiendo vivo… en fin, Ay lord of the lords…
Jajajaja, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Hear, Bien dicho, estimado amigo Gaze, muy bien dicho. Espera contestación de los acolit@s de La Gran Mentira.Por cierto, hablando de los suicidas, ¿Donde está la ayuda que van a mandar a Haití? Pregunto porque lo que España siempre dona son los sobrantes socialistas de aceite de oliva que no se pudieron vender a Italia. (En Haití no se come aceite de oliva.)Lluís, hora de preocuparte, y esta vez no por tu profesión, esta vez las campanas tañen por ti.
Es ridiculo que un comentarista supuestamente progresista defienda el uso del velo. Estoy harto ya de esta "tolerancia" mal entendida. Esto si que es suicida. Cuando se enterara por fin esta progresia de salon que el velo es una herramienta de represion y machismo mas atroces a las se someten a las mijeres musulmanas? Lo que todos los paises europeos deberian hacer es seguir a Francia y prohibir el velo. Basta ya de estas idioteces de que el velo representa "diferencia", "pluralismo" y demas sandeces. Velo es opresion, pura y dura. Seria bueno que tambien los "progresistas" de El Pais por fin se enteraran.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_