Los socialistas europeos descartan a Blair
El primer ministro británico, Gordon Brown, se queda solo en la defensa de la candidatura de su predecesor a la presidencia de la UE.- Los dirigentes europeos ceden a la demanda del checo Klaus para firmar el Tratado de Lisboa
En el laberinto de especulaciones sin límite sobre los nombres de los futuros mandatarios de la UE, la única idea que va cuajando es la creciente oposición a Tony Blair para ocupar la futura presidencia de la Unión. Pocas horas antes de la celebración del Consejo Europeo, los dirigentes socialistas mantuvieron un encuentro en el que mostraron su deseo de que el futuro jefe de la diplomacia de la UE "procediera de la familia socialista". Ello sugiere la exclusión implícita del laborista Blair para la presidencia. La reunión que a las mismas horas mantuvieron los líderes pertenecientes al Partido Popular Europeo (PPE), aunque no se habló abiertamente de nombres también se daba por seguro que el futuro alto representante europeo sería para un socialista, según fuentes próximas al PPE.
El rechazo a Blair fue incluso explícito en algunos casos. Tanto el canciller austriaco, el socialdemócrata Werner Faymann, como el ministro de Asuntos Exteriores de Luxemburgo, Jean Asselborn, señalaron que Blair había estado demasiado ligado a George W. Bush y a la guerra de Irak, mientras que el actual inquilino de la Casa Blanca, Barack Obama, había tomado otro tipo de orientaciones. Faymann dijo que "para la presidencia de la Unión hacía falta algún otro" distinto de Blair.
El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, calificó de "razonable" el acuerdo de los socialistas que han mostrado "su preferencia de que el alto representante pertenezca a su grupo". Zapatero, señaló que aunque no se había descartado a nadie "ha habido una gran determinación del Partido Socialista de aspirar a los puestos de alto representante y vicepresidente de la Comisión".
Pero el frente socialista sufre una seria fisura por el empeño del primer ministro británico, Gordon Brown, en defender para la presidencia de la Unión a su predecesor. "El Gobierno británico", dijo, "es de la opinión de que Blair es un excelente candidato". Brown precisó que Blair no era todavía un candidato oficial, "nos gustaría que lo fuera", dijo "en tal caso lo apoyaríamos". El resuelto apoyo a Blair por parte de Reino Unido podría, sin embargo, tener segundas intenciones. Si la candidatura del ex primer ministro británico no prospera, Londres tendría más fuerza para exigir a cambio el puesto de alto representante para su ministro de Exteriores, David Miliband.
El secretario del Foreign Office goza de muchas simpatías dentro de las filas socialistas europeas. "Miliband es un candidato apropiado para el puesto de alto representante", dijo Martin Schulz, jefe de los socialistas en el Parlamento Europeo.
Un presidente "europeísta"
Para Zapatero, el futuro presidente de la Unión debe ser sobre todo "un europeísta", partidario de seguir "fortaleciendo las actuaciones comunes de la Unión". Los socialistas eligieron a una troika formada por el propio Zapatero, Faymann y el presidente del Partido de los Socialistas Europeos, Poul Nyrup Rasmussen, para negociar con el PPE los nombres de los futuros dirigentes europeos.
Con independencia del debate entre los partidarios y detractores de Blair, hay varias parejas que se barajan para presidente y alto represente. El ex canciller austriaco, Wolfgang Schüssel con Miliband. Otra combinación es la del primer ministro holandés Jan Peter Balkenende también con Miliband. Si se mantuviera en pie la candidatura de Blair podría figurar como aspirante a alto representante, el comisario para la Ampliación, Olli Rehn.
Pero las especulaciones siguen engrosando las listas de candidatos. A los nombres que más han circulado -como el del primer ministro de Luxemburgo, Jean-Claude Juncker; el ex presidente español Felipe González, y los ex primeros ministros Paavo Lipponen (Finlandia) y Bertie Ahren (Irlanda)- se han unido los de Fredrik Reinfeldt, primer ministro de Suecia, y el ex primer ministro irlandés, John Bruton.
Una mujer para la presidencia
El presidente del Parlamento Europeo, el polaco Jerzy Buzek, sorprendió a los miembros del Consejo Europeo al pedirles que consideraran "seriamente el nombramiento de una mujer para ocupar la futura presidencia de la Unión". Buzek espetó a los líderes: "Miren cuantas mujeres hay aquí". En la reunión no había más de media docena entre más de 50 hombres. Los nombres de mujeres que han trascendido son los de Mary Robinson, ex presidenta irlandesa; Vaira Vike-Freiberga, ex presidenta de Letonia; Dalia Grybauskaité, presidenta de Lituania o Tarja Halonen, ex presidenta de Finlandia.
La canciller alemana, Angela Merkel, advirtió: "Me gustaría", dijo, "primero ver que todos los países terminan antes la ratificación del Tratado de Lisboa, sólo entonces estaré dispuesta a hablar de nombres", dijo antes de entrar en la reunión del Consejo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.