Aplazada por séptima vez la elección del presidente de Líbano

El Parlamento libanés ha vuelto a aplazar, por séptima vez, la sesión parlamentaria para elegir a un nuevo presidente, esta vez por la falta de acuerdo entre la mayoría antisiria y la oposición prosiria sobre las reformas constitucionales necesarias para que el candidato -a priori- de consenso, el jefe del Estado Mayor, general Michel Suleiman, pueda acceder al cargo. El presidente del Parlamento, Nabih Berri, ha fijado el próximo martes 11 de diciembre como fecha para un nuevo intento.

Tras entrevistarse con el líder de la mayoría antisiria, Saad Hariri, hijo del ex primer ministro Rafik Hariri, asesinado en febrero de 2005, el presidente del Parlamento, Sabih Berri, ha emitido un comunicado en el que informaba del aplazamiento y de la nueva fecha. La cercanía de la nueva fecha parece indicar que las partes están cerca de cerrar un acuerdo que permita un reparto de poder que ponga fin a la crisis política en la que está inmerso el país.

Parecía que esta vez iba a ser diferente, dado el grado de consenso que había obtenido el jefe del Estado Mayor, el general Michel Suleiman. Sin embargo, las conversaciones de última hora sobre los cambios constitucionales necesarios para que Suleiman pudiera hacerse con el cargo han fracasado, obligando al séptimo aplazamiento de la votación del presidente desde septiembre. El puesto está vacante desde que hace dos semanas expirara el mandato del prosirio Emile Lahoud. Desde entonces, sus funciones están en manos del Gobierno, dirigido por Fuad Siniora, de la mayoría antisiria.

Suleiman parece gozar de las simpatías de ambos bandos, pero para que su elección se lleve a cabo es necesario un cambio en la Constitución del país, que en su artículo 49 establece la prohibición de que un alto funcionario sea elegido presidente del país salvo que dimita de su cargo dos años antes de acceder a la máxima magistratura. No es el caso de Suleiman, que actualmente es jefe del Estado Mayor. La falta de acuerdo sobre cómo llevar a cabo esos cambios ha sido el detonante para el nuevo aplazamiento.

Además, las conversaciones han fracasado por la futura composición del Gobierno. La oposición antisiria sostiene que el Gobierno actual, dirigido por Siniora es ilegal desde que los seis ministros de la oposición que forman parte de él lo abandonaron. Ahora quieren saber las carteras que ocuparán en el nuevo Gabinete. El ministro francés de Exteriores, Bernard Kouchner, ha estado esta semana en Líbano para acercar posiciones entre las dos partes.

Desde septiembre, cuando se iniciaron las conversaciones para buscar un sustituto a Lahoud, no ha habido acuerdo para un candidato de consenso y se temía que la tensión entre ambos bandos, más de una vez reflejada en las calles, unida a la falta de presidente, diera origen a disturbios. Por el momento, no ha sido así y una calma tensa se vive en el país desde entonces, en parte por la advertencia de Suleiman, que a la marcha de Lahoud dijo que no permitiría choques entre las distintas facciones en la calle.