Un detenido en una comisaría estadounidense fallece por no haber recibido su medicación
Los familiares denuncian que la Policía se negó a recibir los medicamentos para proporcionárselos al detenido
Un detenido de nacionalidad brasileña ha muerto en una comisaría de Policía estadounidense, al no haberle proporcionado la medicación que necesitaba para la epilepsia, según ha denunciado la hermana del fallecido.
Edmar Alves Araujo, de 34 años y residente en Milford, Massachussets, falleció el pasado martes tras pasar a disposición del servicio de Inmigración y Aduanas (ICE), a cuyos agentes fue entregado por la policía de Woonsocket. Araujo fue detenido en un control de carretera al comprobar que pesaba sobre él una orden para su deportación desde 2002.
La portavoz del ICE, Paula Grenier, señaló que Araujo permaneció detenido por el ICE durante poco más de una hora cuando empezó a evidenciar "muestras físicas de malestar" y fue llevado al Hospital de Rhode Island, donde finalmente murió.
Según señaló la oficina forense, las pruebas para determinar la causa de la muerte del detenido podrían alargarse durante tres meses.
Por su parte, la hermana de Araujo, Irene, declaró al diario The Boston Globe que tras recibir una llamada de su hermano, se dirigió a la comisaría para llevarle su medicación contra la epilepsia ya que, aseguró, "tenía problemas de ataques" y "no podía pasar un día sin tomarla".
Irene Araujo aseguró que la Policía se negó a recibir la medicación, aduciendo que era el detenido quien debía solicitar dichos medicamentos. Cuando un amigo de la familia trató de entregar la medicación el día siguiente por la mañana, Araujo ya había fallecido.
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