Israel dice haber matado a más de 300 de los 2.000 combatientes de Hezbolá
Israel aprueba una ampliación de la ofensiva terrestre en Líbano.- Olmert anuncia que no habrá un alto el fuego hasta que "la amenaza sea eliminada"
El ministro de Justicia Israelí, Haim Ramon, ha dicho que más de 300 de los 2.000 combatientes de Hezbolá han muerto desde que Israel comenzara a bombardear el sur de Líbano. "El objetivo es golpear a los combatientes de Hezbolá y sus arsenales. A día de hoy no estamos haciendo un mal trabajo", ha dicho Ramon a la televisión Canal 10. El Gabinete de Seguridad israelí, encabezado por el primer ministro, Ehud Olmert, ha decidido hoy ampliar las operaciones militares por tierra en el sur del Líbano, según han confirmado fuentes oficiales israelíes. El plan adoptado prevé que el Ejército penetre unos seis kilómetros por el sur de Líbano para despejar la zona de bases o instalaciones de la guerrilla chií Hezbolá. La operación, previa a un eventual despliegue internacional, podría durar hasta dos semanas.
Según han informado fuentes oficiales después de la reunión del Gabinete de Seguridad, se ha aprobado una operación por tierra por la que las fuerzas de tierra israelíes limpiarían [de milicianos y bases de Hezbolá] una zona de entre seis uy siete kilómetros junto a la frontera sur libanesa. De esa forma, se evitaría que los misiles de la guerrilla chií cayesen en territorio israelí y se obligaría a Hezbolá a una retirada hacia el norte, hasta más allá del río Litani, que dista unos 20 kilómetros de la frontera.
La operación duraría entre 10 y 15 días, según ha declarado el ministro israelí de Infraestructuras, Benjamín Ben Eliezer. "Entiendo que el tiempo requerido para completar el trabajo, es decir, que el área en la que queremos que se despliegue la fuerza internacional quede limpia de Hezbolá, será de entre 10 y 15 días", ha declarado el antiguo ministro de Defensa en la radio del ejército.
Antes de este anuncio del Gobierno israelí, el primer ministro, Ehud Olmert, había afirmado que el alto el fuego en la zona fronteriza entre Israel y Líbano no llegará "en las próximas horas" ni tampoco "en los próximos días", como había especulado ayer la secretaria de Estado de EE UU, Condoleezza Rice. Olmert ha asegurado que "no hay alto el fuego y no habrá alto el fuego" y que Israel "continuará luchando" contra Hezbolá porque no puede "permitir que sigan fabricando más morteros ni más misiles". Por tanto, Israel pondrá fin a la guerra cuando "la amenaza sea eliminada y nuestros soldados capturados vuelvan a casa sanos y salvos".
Nuevos ataques en Líbano
Aviones de combate israelíes han bombardeado a primeras horas de este martes la ciudad libanesa de Hermel, una de las fortalezas de Hezbolá. Los misiles han caído sobre Hermel, a 120 kilómetros al norte de la frontera israelí en el Valle del Bekaa, al este del Líbano, según varios testigos, que han dicho que los aviones de combate han soltado al menos cinco misiles sobre la ciudad.
Además, también se ha producido otro ataque en las cercanías de la frontera con Siria, a aproximadamente unos 10 kilómetros al norte de Hermel, sobre la carretera que une Qaa con Homs, uno de los cuatro pasos fronterizos entre Siria y el Líbano. Estos ataques aéreos podrían haber provocado que dos pasos fronterizos hayan quedado prácticamente inhabilitados, ya que los ataques aéreos de los últimos tres días ya habían dejado la carretera Beirut-Damasco impracticable.
Según el Gobierno libanés, los bombardeos israelís han dejado ya en las últimas tres semanas un balance de 828 muertos y 3.200 heridos.
Siria prepara a su ejército
Durante su discurso anual a las Fuerzas Armadas, el presidente de Siria, Bachar el Asad, ha pedido a su Ejército que se mantenga preparado para hacer frente a "los retos regionales". Asad ha hecho un llamamiento a todas las formaciones y unidades a "intensificar los esfuerzos en los entrenamiento y trabajar para lograr una mayor preparación e incrementar la disposición". "Debemos estar alerta para que cualquier esfuerzo sea preparado en entrenamientos ahora para evitar una gota de sangre cuando llegue el momento", ha agregado el presidente de Siria.
Asad ha asegurado además, que Siria está más determinada a apoyar a Líbano y no cederá ante la presión internacional. "Todas las amenazas de las fuerzas hegemónicas que no nos mantendrán alejados del curso de la liberación y el apoyo a nuestros hermanos y a la resistencia", ha afirmado.
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