Las acusaciones de corrupción obligan a dimitir al presidente del partido de Lula

La crisis provocada por la catarata de acusaciones de corrupción vertidas contra la formación de Luiz Inácio Lula da Silva ha obligado a dimitir al presidente del Partido de los Trabajadores (PT), José Genoino. Anoche, un asesor de su hermano fue detenido con una maleta repleta de dinero, cuyo origen no supo explicar.

Ya antes habían abandonado su cargo el ministro jefe de la Presidencia brasileña, José Dirceu, el secretario general del PT, Silvio Pereira, y su tesorero, Delubio Soares.

La renuncia de Genoino se produce entre una salva de denuncias de corrupción, y apenas horas después de la detención de un asesor de José Nobre Guimaraes, diputado del Partido de los Trabajadores en el estado de Ceare y hermano de Genoino. No se conoce el destino de los 185.000 dólares que José Adalberto Viera da Silva llevaba consigo bajo su ropa interior y en un maletín, pero su arresto supuso un golpe más contra el Gobierno de Lula y precipitó la caída de Genoino.

La policía le ha decomisado los 85.000 dólares (71.404 euros) que llevaba en una maleta de mano, y los 100.000 dólares (84.005 euros) que escondía en su ropa interior. Las fuerzas de seguridad tomaron esta decisión después de que Adalberto Viera no supiera explicar el origen del dinero que llevaba encima cuando pretendía coger un vuelo a Fortaleza, la capital de Ceará, con escala en Brasilia.

Pese a que la prensa ha publicado en las últimas semanas varios documentos sobre los vínculos del PT con el publicista Marcos Valerio Fernandes, señalado como intermediario en el pago de los sobornos, Genoino insistió este viernes en que su partido no ha hecho nada ilegal.

Según documentos divulgados por la prensa, de las cuentas de las empresas de Fernandes se retiraron, en los dos últimos años, millonarias sumas de dinero en efectivo que, supuestamente, se usaron para pagar sobornos a congresistas de partidos aliados del PT.