El principal partido suní de Irak anuncia que boicoteará las elecciones del 30 de enero

El principal partido suní de Irak, el Partido Islámico (PII), ha anunciado hoy oficialmente su retirada del proceso electoral que desembocará en los comicios del próximo 30 de enero ante la falta de seguridad en el país. El anuncio se produce horas después de que al menos 14 personas murieran y 66 resultaran heridas en Bagdad en un atentado suicida dirigido contra el líder del principal partido chií, el que más posibilidades tiene de ganar las elecciones, y que ha resultado ileso.

En rueda de prensa, Mohsen Abdelhamid, el secretario general del PII, rama iraquí de los Hermanos Musulmanes, ha explicado que esta decisión se debe a que las autoridades han rechazado la petición de su formación de aplazar los comicios ante el empeoramiento de la seguridad en el país. El PII ha sido hasta ahora el único partido confesionalmente suní que ha participado en las instituciones del Irak post-Sadam, si bien se ha mostrado siempre muy crítico con la gestión del Gobierno provisional y la actuación de las tropas de ocupación.

El PII basa su decisión en que las autoridades del país no sólo no han respondido a su petición de retrasar los comicios, sino que además "también se han negado a tratar la situación de seguridad". A esto se añade el hecho de que el pueblo iraquí "no entiende las elecciones y no tiene la información completa para participar en ellas", y que hay al menos 5 ó 6 provincias del país a las que no han llegado los formularios necesarios para inscribirse como votantes, por lo que "en ellas no podrán celebrarse comicios limpios".

Abdelhamid ha pedido un periodo suplementario de seis meses para conseguir que el pueblo iraquí esté preparado. En todo caso, y si las autoridades accedieran a aplazar las elecciones, el dirigente islamista ha dejado claro que su partido se mostrará dispuesto a participar en ellas.

Nuevo atentado en Bagdad

Un coche bomba ha hecho hoy explosión en la sede central en Bagdad del principal partido chií iraquí, la Asamblea Suprema para la Revolución Islámica, causando al menos 14 muertos -incluido el terrorista suicida- y 66 heridos, han informado oficiales. El atentado iba dirigido contra el presidente de esa formación, Abdelaziz al Hakim, que ha resultado ileso, ha declarado un miembro de la directiva del partido.

Amar al Hakim, sobrino de Abdelaziz, ha declarado a la cadena de televisión Al Yazira que el suicida que perpetró el atentado con un coche bomba sabía que Abdelaziz se reúne todos los días a la misma hora con la cúpula del partido. Sin embargo, ha confirmado que ninguno de los dirigentes ha resultado herido, y los muertos son todos guardias de seguridad que se encontraban en el exterior del edificio.

Según ha explicado a Efe el portavoz del partido, Hazem al Hasani, el atentado se produjo a primera hora de la mañana, cuando la plana mayor de la formación se encontraba reunida, presidida por su jefe, Abdelaziz al Hakim. Un conductor suicida llegó a toda velocidad desde el exterior de la sede, en el barrio de Al Yadriya (suroeste de Bagdad), y empotró su coche cargado de explosivos contra el edificio. Hazem al Hasani ha atribuido el atentado a "diabólicas fuerzas oscurantistas que nos quieren impedir reconstruir nuestro país".

La sede central de la Asamblea Suprema para la Revolución Islámica (ASRI) se encuentra en la residencia confiscada del antiguo ministro iraquí de Asuntos Exteriores, Tarek Aziz, y acoge además el domicilio del propio Abdelaziz al Hakim. Abdelaziz es hermano del asesinado Mohamed Baqr al Hakim, que falleció por la explosión también de un coche bomba en la ciudad de Nayaf, en agosto de 2003. Abdelaziz, que tomó las riendas del partido tras el asesinato de su hermano, encabeza ahora la lista electoral Alianza Iraquí Unida, dominada por los chiíes y que es vista como la fuerza política con más posibilidades de ganar en los comicios del 30 de enero próximo.