EE UU y los chiíes de Al Sáder rompen dos meses de tregua con una guerra abierta en Nayaf

Tras más de dos meses de calma por la tregua acordada entre los insurgentes y las tropas estadounidenses, la ciudad santa iraquí de Nayaf, uno de los vértices del triángulo suní situada a unos 100 kilómetros al sur de Bagdad, se ha convertido de nuevo en un campo de batalla. Mientras los soldados norteamericanos combaten con las milicias del clérigo chií Múqtada al Sáder, el religioso ha llamado de nuevo a sus fieles a la lucha contra el invasor. Los combates se han cobrado ya la vida de al menos siete iraquíes y la de un soldado de EE UU.

Según fuentes médicas, además de seis insurgentes muertos, 12 personas han resultado heridas en una auténtica batalla campal con las tropas estadounidenses, que en los días pasados han cercado la casa del clérigo radical. El Ministerio de Sanidad ha informado, además, de que un médico del hospital general de la ciudad ha muerto y otros cuatro empleados han resultado heridos por la caída de cinco misiles en el centro médico. Por su parte, el mando estadounidense ha informado de que uno de sus soldados ha fallecido y otros cinco han resultado heridos al ser atacado su convoy con lanzagranadas en las afueras de la ciudad. Uno de los helicópteros americanos ha sido derribado y "varios miembros" de su tripulación han resultado heridos. En un comunicado, el mando estadounidense indica que su tropas se enfrentan a un "número importante de agresores", provistos de lanzagranadas, ametralladoras de gran calibre y armas ligeras.

Al Sáder ha llamado a sus seguidores a un nuevo alzamiento nacional -"combatid a los blasfemos, combatid a los americanos", dice uno de sus bandos, difundido hoy en Nayaf-, por lo que sus milicianos combaten a los americanos tanto en la ciudad santa, donde tiene su refugio el clérigo, como en otras ciudades del país. Así, los soldados británicos han tenido que hacerles frente en Basora, la segunda ciudad del país, al sur. En el tiroteo que han entablado, tres insurgentes han muerto, según el mando británico.

También la capital del país, Bagdad, vive en tensión por la nueva llamada de Al Sáder. En Sáder City, un barrio bagdadí leal al clérigo, sus seguidores han entablado combates con las fuerzas de ocupación. Cinco civiles han muerto, según el Ministerio de Sanidad, mientras que 58 personas han sido heridas.

Ambos bandos, el de Al Sáder y las fuerzas de ocupación, culpan al adversario de la ruptura de la tregua, acordada el pasado mes de junio. El caso es que los combates resurgen a menos de dos semanas para la celebración de una conferencia política nacional de la que debe salir una asamblea que prepare al país para las elecciones del año que viene. Al Sáder ya ha anunciado que no tiene intención de acudir a esa asamblea. Con apenas 31 años, el clérigo se ha convertido en el primer problema para las fuerzas de ocupación y para el nuevo Gobierno interino iraquí, por su radicalismo y su enorme poder de convocatoria. Sus seguidores, organizados en milicias, combaten a las fuerzas estadounidenses desde poco después de la caída del régimen de Sadam Husein.

La tregua venía resquebrajándose desde hace algunos días. El domingo, la policía iraquí arrestó a uno de los lugartenientes de Al Sáder en Kerbala, otra ciudad santa cercana a Nayaf. El lunes, ya se produjeron combates entre los marines americanos y las milicias del Mahdi, con varios insurgentes muertos y ayer, las tropas americanas cercaron la casa del clérigo en la ciudad, lo que ha desatado la cólera de Al Sáder y sus seguidores. Sin embargo, EE UU culpa al chií de la escalada, diciendo que hoy han tenido que acudir a una comisaría de Nayaf que las milicias estaban atacando y que sólo han respondido a las agresiones de los leales a Al Sáder.

Atentado contra la policía

A unos 70 kilómetros al sur de la capital, en Mahawil, cerca de la localidad de Hilla, nueve personas han muerto, entre ellas cuatro suicidas, al hacer explosión un minibús junto a una comisaría de policía en la que hacían cola decenas de aspirantes. Otras 21 personas han resultado heridas. En otro incidente, dos capitanes de la policía iraquí han sido asesinados a las afueras de las ciudad de Al Mussayaf, también al sur de Bagdad, al caer en una emboscada tendida por presuntos insurgentes.