Registrados combates esporádicos en Kufa tras la tregua pactada entre EE UU y los chiíes radicales
Al Sáder podría asistir como cada viernes a la mezquita donde suele dirigir el rezo
Soldados de Estados Unidos y milicianos chiíes protagonizan esta mañana enfrentamientos esporádicos en la ciudad de Kufa, vecina de de Nayaf, donde ayer se acordó un alto el fuego entre las tropas estadounidenses y las milicias fieles al clérigo radical Múqtada al Sáder.
Según ha informado la radio iraquí, los enfrentamientos son "esporádicos" en esta ciudad, donde el clérigo radical chií Al Sáder suele pronunciar sus incendiarios discursos. Tanques estadounidenses siguen apostados cerca de esta mezquita y de la residencia de Múqtada.
Sin embargo, la situación en la ciudad santa de Nayaf se presenta tranquila y durante la noche no se han registrado incidentes de importancia. Precismante, la novedad en Nayaf ha sido la calma que ha vivido en las últimas horas, después de meses de intensos y violentos combates.
Suspendida la orden de captura de Al Sáder
Ayer miércoles, el Ejército de Estados Unidos suspendió sus operaciones en Nayaf tras dar la bienvenida a la propuesta de tregua del clérigo radical de retirar a sus milicianos de los edificios gubernamentales, aunque las tropas estadounidenses advirtieron de que no pensaban retirar a sus tropas de los alrededores de Nayaf.
En su propuesta, Múqtada ofrecía evacuar a sus milicianos de los lugares santos chiíes del centro de Nayaf para permitir la entrada de la policía iraquí. A cambio, el líder de la revuelta de los chiíes obtuvo de la coalición la suspensión temporal de la orden de captura dictada contra él.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.