Prodi advierte a España y Polonia que no hay alternativa al nuevo reparto de poder en la UE

A un día para que los jefes de Estado y de Gobierno de los 25 comiencen en Bruselas los debates para cerrar la primera Constitución europea, y por si quedaba alguna duda, el presidente de la Comisión, el italiano Romano Prodi, ha lanzado una seria advertencia a los Gobiernos de España y Polonia: cualquier acuerdo sobre el reparto de votos que no contemple el sistema de doble mayoría (50% de los estados y 60% de población) es "inaceptable". Madrid y Varsovia buscan una vía intermedia que les posibilite bloquear decisiones tomadas por alguno de los cuatro grandes de la UE (Alemania, Francia, Reino Unido e Italia).

Entre las opciones que se barajan está la de consagrar la doble mayoría pero elevar el umbral de población del 60%. La segunda alternativa pasaría por seguir negociando hasta febrero, algo que nadie descarta. Otra, aprobar la constitución y dejar aparcado el reparto de poder hasta una próxima cumbre a celebrar antes de 2009; es la llamada clausula de rendez-vous, rechazada por Francia y Alemania pero bien vista por España, Polonia y el Reino Unido.

Ninguno de estos caminos parece convencer a Romano Prodi, que ha asegurado que "no existe atmósfera política para un acuerdo a la baja" en la histórica cumbre de este fin de semana. El presidente del Ejecutivo comunitario ha recalcado, además, que un aspecto crucial del futuro texto es que no debe tener "remanentes" o flecos que se dejen sin resolver, en clara referencia al reparto del poder.

"La Comisión Europea no podrá apoyar ninguna propuesta que haga más difícil el procedimiento de decisión de la UE", ha continuado. En este sentido, ha confiado en que la reunión de los jefes de Estado y de Gobierno no se convierta en un "mercadeo", ya que en su opinión "todos tienen que actuar en interés de Europa". "Los puntos de partida que dio la Convención son aceptables y ofrecen perspectivas de futuro para la UE, por lo que no pueden ser variados a última hora", ha reiterado el presidente del Ejecutivo comunitario.

El presidente de la Comisión ha recordado que el sistema que él defiende es la doble mayoría, que respeta la doble naturaleza de la Unión (Estados y pueblos) y que tiene la peculiaridad de que es "el más eficaz, visible y transparente". Además, ha recordado que la Comisión apostó por una mayoría simple, y que ya admite la corrección del 60% de la población, pero "no podrá apoyar un sistema que ponga más difícil la toma de decisiones".

Amenaza de veto polaco

Las palabras de Prodi han llegado horas después de la amenaza vertida por el presidente de Polonia, Alexandr Kwasniewski, que anoche declaró que su país vetaría la Constitución europea, que se prevé aprobar en la cumbre que comienza el viernes en Bruselas, si los derechos de voto de su país se ven reducidos.

Kwasniewski señaló que si la situación establecida en el Tratado constitucional se mantiene, "sin una opción para un acuerdo, no lo podremos aprobar". "Tenemos razones para luchar por un buen equilibrio en el seno de la UE", agregó el presidente polaco, quien junto con el presidente español, José María Aznar, ha defendido con firmeza la ventaja adquirida en el Consejo europeo de Niza que se celebró en diciembre de 2000. Niza preveía una triple mayoría en virtud de la cual las decisiones serán válidas si son apoyadas por más del 50% de los Estados que representen al menos el 62% de la población y que cuenten al menos con 232 de los 321 votos que habrá en una UE con 25 Estados.